El Teatro Pavón de Madrid acoge dentro de su programación La madre, obra del dramaturgo francés Florian Zeller con Aitana Sánchez-Gijón como protagonista. Una conmovedora historia que nos invita a reflexionar sobre la soledad y los límites de la cordura bajo la dirección de Juan Carlos Fisher.
El barrio, obra escrita y dirigida por Diego Da Costa, cerró con éxito su primera temporada en la Sala Lola Membrives del Teatro Lara de Madrid, y será prorrogada en mayo. El montaje, segunda producción de la compañía Joie de la Colina, explora la toxicidad de los estereotipos masculinos y la manera en la que los hombres se relacionan.
Se estrena en el Teatro Real de Madrid uno de los títulos mas esperados y ansiados de la temporada: La pasajera de Mieczyslaw Weinberg. Una ópera que remueve conciencias y nos muestra las heridas de uno de los periodos más oscuros de nuestra reciente historia, el exterminio judío en los campos de concentración nazis.
The Producers, de Mel Brooks, llega al Teatro Alcalá de Madrid, tras ser el musical más visto de la temporada teatral de Barcelona. Empresarios teatrales sin escrúpulos, actores pésimos, fascismo y brillo de bajo presupuesto es el mundillo en el que se mueven los protagonistas en un Broadway de 1959 que mucha similitud tiene con el panorama teatral actual.
Estamos frente a uno de los acontecimientos teatrales más esperados de la temporada: José María Pou da un auténtico recital interpretativo sobre las tablas del Teatro Bellas Artes de Madrid en un montaje dirigido por Josep Maria Mestres y basado en la aclamada obra del escritor francés Florian Zeller llamada El padre.
El Teatro Infanta Isabel de Madrid recibe a la mítica compañía Joglars que presenta su último montaje, El Rey que fue. Un montaje que recupera el consabido talante de la compañía de Albert Boadella y que se traduce en una excelente sátira sobre la figura del emérito.
Victoria Camps adapta Danny y Roberta (Danny and the deep blue sea) de John Patrick Shanley. La obra nos adentra en el conflicto y el sueño de redención de dos personajes empujados a sus límites, interpretados con pulso y emoción por la propia Victoria Camps y Pedro Moreno en la sala Nave 73 de Madrid todos los sábados de marzo.
El Teatro de la Abadía de Madrid, en colaboración con el Teatro Real, ofreció durante cuatro únicas funciones Pierrot Lunaire, de Arnold Schoenberg; cuando se cumplen 150 años de su nacimiento. El montaje, producción originaria del Gran Teatre del Liceu, está interpretado y dirigido por Xavier Sabata con prólogo basado en el mito de Narciso a partir de pasajes de la Metamorfosis de Ovidio.
Mi abuela no se llama Carmen, de Ana Mayo, se acaba de estrenar en la Sala Jardiel Poncela del Teatro Fernán Gómez de Madrid. Una auto-ficción donde la autora nos lleva de Madrid a Barcelona, del presente al pasado, y de la memoria al legado.
Alfredo Sanzol dirige su primer Lorca y presenta, en el Teatro María Guerrero de Madrid, La casa de Bernarda Alba. Un montaje que se aleja del imaginario tradicional y revisita la obra clásica ofreciéndonos una visión más humanizada de la matriarca.