Voltaire es un espectáculo con dramaturgia de Juan Mayorga y dirección de Ernesto Caballero producido por Teatro Urgente sobre las tablas del Teatro Quique San Francisco de Madrid. La obra aborda una conversación que transcurre en torno al tema de la tolerancia y lo intolerable que nos hará pensar.
El Teatro de la Abadía (Madrid) acoge el estreno de una producción propia tan original como excelente. Descendimiento trasciende la pintura que la inspira para convertirse en una vivencia que pasa de lo artístico y lo sensorial a lo espiritual y lo elevado de la mano de Carlos Marquerie.
El director Pablo Messiez adapta y pone sobre las tablas del Teatro Valle-Inclán de Madrid la obra de teatro Los días felices, una pieza clave en el teatro del destacado dramaturgo Samuel Beckett.
La sala Francisco de Nieva del Teatro Valle-Inclán, que suele acoger siempre gratas sorpresas de la cartelera, nos presenta al tándem argentino definitivo: Pablo Messiez y Fernanda Orazi, con Los días felices de Samuel Beckett, un monólogo involuntario a la “vieja usanza”.
El estreno de algo de Pablo Remón siempre es noticia, pero si además es su primer estreno de un texto no escrito por él, y tomando a Lorca y su Doña Rosita, entonces la noticia es de portada. La Sala Negra de los Teatros del Canal acoge el estreno absoluto de una obra que emociona, conmueve y confirma que Pablo Remón es un autor/director de los que no defrauda.
Me enfrento a la hoja en blanco, al mismo blanco que exuda el escenario planteado en Ensayo. El admirado Pascal Rambert aterriza en el Kamikaze con su disección de las relaciones de amistad y amorosas. Ensayo es un duro golpe al espectador. Un ejercicio que agota y deja en suspenso al que quiera sumergirse de lleno en ese universo.
Se llena el ambigú del Teatro Kamikaze de unos diálogos endiablados, juguetones, irónicos e incluso absurdos en algún momento. Barbados etcétera disecciona el mundo de la pareja utilizando un lenguaje particular.