David Selvas dirige en el Teatre Lliure de Barcelona una magnífica versión de Tots eren fills meus de Arthur Miller, tan visualmente sencilla como impactante. Lo consigue a partir de una comprensión profunda del texto y sus tensiones, una dosificación sabia de la intensidad del drama, y un elenco idóneo totalmente entregado a la verdad de sus personajes.
La Seca Espai Brossa ha acogido un espectáculo tan inusual como triunfante. Y me morí nos adentra en un contexto mexicano, donde la música y los cuentos copan el protagonismo. Tanto como la aproximación festiva y expresiva sobre la muerte. Tres intérpretes entregados y tocados por la gracia de la viveza y la elocuencia nos ensimisman con su talento creativo.