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06.03.2015 Críticas  
¿Conoceremos, por fin, EL SECRETO DE LAS MUJERES?

Una incógnita para el género masculino que aún en el siglo XXI está sin resolver: cuál es EL SECRETO DE LAS MUJERES. El Teatro Galileo presenta un nuevo musical, totalmente original, sobre esta eterna pregunta que, ni sabiendo ya que los hombres son de Marte y las mujeres de Venus, conseguimos respondernos.

Esta vez, Diágoras Producciones ha decidido contárnoslo desde un punto de vista ingenuo y en forma de musical cómico y romántico. Se trata de una sucesión de escenas en las que el protagonista de la historia se esfuerza una y otra vez en encontrar la respuesta a esta gran pregunta, lo que le lleva a vivir una relación obsesiva con todas y cada una de las mujeres de su vida, reales e imaginarias.

El formato elegido para esta producción es sencilla, a base de rápidos y divertidos sketches con canciones pegadizas en algunos de ellos, lo que trae, como resultado, un gran dinamismo en el ritmo del espectáculo. El guión va acorde con esta dinámica, arrancando risas constantes en el público. Especialmente cómicos los pequeños monólogos intercalados entre las escenas que dan toques de frescura a la estructura del espectáculo.

Los seis actores en el escenario están excelentes y es admirable verles embarcarse en este proyecto: una gran apuesta por el musical original en España. Cuentan con la ya conocida Lourdes Zamalloa a la que se pudo ver en «Sonrisas y Lágrimas» y que interpreta una de las canciones más bonitas del musical. Se echa de menos no poder disfrutar de su voz en más ocasiones. La interpretación de todos los actores es sobresaliente, especialmente la de Camino Texeira y Alicia Lobos que deslumbran al público con grandes dotes camaleónicos al interpretar las diferentes mujeres que pasan por la vida del protagonista. Hay pequeños detalles en sus interpretaciones que hacen grande la escena dando muchos momentos muy divertidos.

La banda sonora original que acompaña esta obra no es del clásico estilo musical de Broadway sino que se acerca más a la música pop, con temas modernos y pegadizos. La dirección actoral es muy notable y lleva el ritmo de la comedia con grandes personajes basados en estereotipos que funcionan a la perfección. Los personajes se visten de forma sencilla, resolutiva y jugando con los colores, al igual que la escenografía. Ésta se basa en un gran cubo de Rubick con todas las piezas desmontadas. A medida que avanza la obra parece que los cubos multicolor se van ajustando poco a poco, como si el protagonista fuera encajando las piezas del puzzle para conseguir averiguar el secreto que le atormenta. Se trata de una apuesta divertida, a la vez que sencilla. Sin embargo, por un momento, este colorido (tanto de la escenografía y el vestuario) puede llevar a dar la sensación de ser un espectáculo familiar.

EL SECRETO DE LAS MUJERES es un nuevo punto de vista, cómico y musical, sobre un tema que flota en el aire entre hombres y mujeres desde hace una eternidad, pero ¿alguien sabe realmente cuál es el secreto de las mujeres?

Crítica realizada por Laura Castrillón

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