novedades
 SEARCH   
 
 

05.01.2018 Críticas  
Adiós a La Maña, adiós al Paralelo

Lita Claver se despide de los escenarios y lo hace en casa, en el Pararelo. El Teatre Apolo acoge Un reencuentro inolvidable en el que la querida artista se reúne junto a Fernando Esteso para decir adiós y dar las gracias. Y, ¡qué suerte poder asistir a este acontecimiento!

No se puede, ni (en mi humilde opinión) se debe reseñar un espectáculo de estas características. Por lo menos de un modo convencional. Señoras y señores, no olvidemos que estamos ante un nombre propio, emblema de la época dorada del espectáculo en la ciudad condal. ¿Quién no ha paseado por la avenida y ha contemplado los carteles donde La Maña, imponente y explosiva, nos llamaba para adentrarnos en los teatros donde actuaba? Carteles que, lamentablemente, han ido desapareciendo con los teatros. O ya no están o han modificado su programación a los gustos y necesidades de taquilla. Una realidad que no vamos a analizar aquí.

Volvemos a la Revista, género que deslumbró a tantos y tantos espectadores durante mucho tiempo. Nos hemos obsesionado tanto en recuperar un patrimonio que creíamos olvidado que hemos fallado al no entender que todavía estaba aquí. Un reencuentro inolvidable es un título muy adecuado. Tras 60 años de carrera, La Maña se despide en el Apolo, allí donde Colsada impulsó y persistió en el género. Seis décadas y vuelta a los orígenes, ya que como compañero de escena, la artista ha elegido a Esteso, con el que debutó a los 8 años. Humor, chistes, bailes, acrobáticos, canciones y, sobretodo, interacción con el público. Su público. En un momento en el que el significado del star-system está tan devaluado, encontrarse con una artista tan querida y, a la vez, tan humilde y agradecida es tan insólito como destacable.

Entre una escenografía que incluye algunos de los carteles y fotografías más emblemáticos de este intenso recorrido, las fulgurantes coreografías de Marta Tomasa iluminan los espacios entre intervención e intervención. El Ballet Glamour Dance se encarga de que eso suceda con dinamismo y esparcimiento. Los espectaculares números de Duo Acrobàtik Pack destacan en un show en el que de, algún modo, también se reivindica la figura de Fernando Esteso. Tan evocado en las ficciones televisivas recientes, aquí lo disfrutaremos en vivo. Incluso nos regalará algún número que aguanta de modo ejemplar el paso del tiempo.

Y La Maña se muestra espléndida ante el público. Parece que le cuesta permanecer en el escenario y persiste en bajar a platea y saludar y bromear con sus seguidores. Personas a las que reconocerá y llamará por su nombre propio. Con un auditorio tan grande y una carrera tan dilatada en el tiempo esto es algo que para un espectador “joven” resultaba impensable. Este acompañamiento mutuo, de la artista y la concurrencia, es algo muy emocionante. Y Lita Claver lo agradece y lo aprovecha para hacerse todavía más grande, si cabe. Besos y abrazos. Una despedida que para el que esto escribe ha sido también bienvenida e iniciación. Y no he podido tener mejor anfitriona. Una trabajadora que tiene tiempo para acordarse de todos los que la han acompañado y ya no están. Mención para Ricard Ardèvol (padre), cuyo hijo, también Ricard (Jr.), dirige el espectáculo.

Las despedidas son tristes, más cuando se da por concluida una carrera profesional cuya línea temporal abarca un período como el que nos ocupa. A veces, uno tiene la sensación agridulce de que no se ha valorado a los profesionales de un modo justo fuera de un contexto determinado. Ni siquiera eso me atrevo a asegurar. Lo que sí puedo afirmar es que ese abrazo y esa lectura de mi mano de Lita Claver no me va a abandonar. Ser testigo en primera persona de cómo se cierra un capítulo de la historia artística de mi ciudad, aquello que siempre me habían explicado y que por fin he podido experimentar por mí mismo, es un regalo muy valioso. Por unos instantes, lo que supuse un pasado glorioso e imaginario hasta ahora, se ha convertido en presente y he podido formar parte de él. Un pedacito del Paralelo. El que siempre insistimos en recuperar y al que sólo hacía falta cuidar un poquito más porque siempre ha estado aquí. Quizá este adiós marque su fin. Lita Claver, gracias por mostrármelo.

Y ahora sí, tras esta hora y media de risas no exentas de nostalgia, vuelve la tristeza. Aunque no quiera, ya me puedo despedir. Adiós a La Maña, adiós al Paralelo.

Crítica realizada por Fernando Solla

Volver


CONCURSO

  • COMENTARIOS RECIENTES