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28.09.2016 Críticas  
Un viaje innovador a la magia de siempre

El ya mundialmente conocido ilusionista Jorge Blass nos trae su show PALABRA DE MAGO al teatro Poliorama de Barcelona. Con sus casi veinte años de experiencia a las espaldas y varios premios internacionales, Jorge Blass demuestra innovación, elegancia y sentido del humor en un show que viaja a los orígenes de la magia para reflexionar sobre el panorama actual.

“Yo creo que la palabra de un mago es honesta” afirma Jorge Blass. “Nosotros engañamos, es verdad, pero siempre avisamos de que vamos a engañar”; aclara el mago desde buen inicio.

PALABRA DE MAGO da comienzo con un breve monólogo del mago en el que explica que su interés por la magia le viene ya de niño, cuando prefería “Jugar con corazones” a jugar con los otros chicos a fútbol. A partir de ahí va dando paso a los distintos números de magia, un paseo por los clásicos del ilusionismo, acompañados en todo momento de la innovación y la elegancia que les imprime Jorge Blass junto a las tres bailarinas que le acompañan (Patricia Rayo, Susana Cantos y Miriam Brito) y a una preparación audio-visual excelente.

Además de los trucos clásicos, Jorge Blass se hace destacar como uno de los pioneros en la utilización de las nuevas tecnologías como elemento escénico en su show. Con una tablet en mano, el mago realiza distintos trucos en los que materializa tanto líquidos como sólidos. Según él, las nuevas tecnologías son parte de nuestra vida cotidiana y por tanto, ha creído indispensable adaptar su espectáculo a la actualidad, cambiando los conejos y palomas por un dispositivo electrónico.

Juegos de cartas, teleportación, levitación, magia de cerca, magia con el público, y otros muchos trucos encadenados a la perfección hacen que PALABRA DE MAGO sea un espectáculo que avanza de forma trepidante durante su hora y media de duración y que mantiene al público atento en todo momento. Un espectáculo con una muy buena puesta en escena, con una buena preparación técnica y con sus momentos de humor, que pese a ser casi todo clichés de actualidad, hacen que el show sea todavía más dinámico si cabe.

Tras disfrutar del espectáculo en el que los juegos tecnológicos nos dejaron un poco más fríos, debo destacar el «mágico» juego con anillas y la levitación final. Dos momentos del espectáculo en los que el artista nos deja con la boca abierta.

Finalmente, Jorge Blass nos habló también de la labor que él, y otros magos, realizan con La Fundación Abracadabra, una fundación que se dedica a hacer reir con la magia a las personas más necesitadas, en hospitales y residencias de todo el mundo, y que cuenta con la colaboración de más de 70 magos voluntarios. No olvidéis visitar su web aquí antes o después de ir a ver a Jorge Blass al Poliorama.

Crítica realizada por Marc Dalmau

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