¿Qué podría salir de un espectáculo de danza basado en la mirada interior, que tiene su base en el flamenco y en el que bailaora y directora son francesas de nacimiento pero amantes de esta disciplina y del teatro respectivamente?
Pues de ahí ha salido el original y admirable proyecto que ha diseñado el director de escena Aurélien Bory para la bailaora Stéphanie Fuster, llamado QUESTCEQUETUDEVIENS? (que traducido significa «¿En que te conviertes?»).
Este montaje pretende mostrarnos las vicisitudes que en ocasiones se padecen cuando nuestro mundo interior se enfrenta a los obstáculos del mundo exterior que nos rodea.
Como ya hiciera anteriormente con la bailarina japonesa Kaori Ito, Bory ha realizado un retrato de la artista en forma de coreografía. Pero en este caso, como hemos dicho antes, le inspiró más plasmar el contraste entre los dos mundos (interior y exterior) y no tanto explicar la vida de Fuster.
A los movimientos y zapateados de ella, y como no podía ser de otra manera en el flamenco, se suman la voz y el quejío de Alberto García y la guitarra de José Sánchez. Y con esto, se cierra el círculo para ser, aparentemente, un espectáculo de flamenco al uso.
Pero Bory ha querido crear una historia diferente dividida en tres actos. Primero, la lucha contra los obstáculos externos en la forma de su vestido de flamenco (de una forma totalmente original, donde el vestido acaba siendo otro yo de la artista). A continuación, el enfrentamiento a los espacios encajonados que la aprisionan, en la forma de una caja cerrada donde se entrena una y otra vez. Y, finalmente, un tablao con agua, como elemento que aparentemente dificulta, pero que en realidad, le da una nueva visión de su propio trabajo.
Además, su zapateado es puro flamenco, pero su movimiento tiene mucho de danza contemporánea, lo que lo hace aún más original todavía. Y que el cantaor vaya con gorra de rapero y el guitarrista con zapatillas deportivas, hace que el ‘flamenco al uso’ que decíamos antes, se convierta en un ‘flamenco independiente’, muy de acorde con el tipo de proyectos al que el Mercat de les Flors nos tiene acostumbrados.
Uno no tiene que ser un gran conocedor y amante del flamenco para entender que este es un arte en sí mismo. Y para los que no son puristas de la disciplina, les será un gustazo disfrutar de algo que sí gusta, pero que puede tener, como todo, tantas vertientes diferentes. Sí, QUESTCEQUETUDEVIENS? es algo diferente; pero no por ello deja de ser un espectáculo tan intenso, vivo y desgarrador como el flamenco clásico.
Y ese ‘algo diferente’ unido al al diseño de luz, sonido y escena, se convierte en cientos de diferentes fotografías para enmarcar. Una detrás de otra. Luz, agua y cuerpo nos dan el material suficiente para convertir todo el espectáculo en una fascinante joya, con banda sonora propia de fondo.
Creadores y artistas que son capaces de reinventar y ejecutar con tanta precisión, no deberían morir nunca.
Crítica realizada por Diana Limones
