La Villarroel de Barcelona presenta en cartel una coproducción con Bitò, Bulthaup y Mola Producciones: Les Irresponsables. La obra escrita por Javier Daulte está dirigida por Sílvia Munt y protagonizada por Cristina Genebat (quien también es la traductora del texto), Marta Marco y Nora Navas.
¿Qué pasaría si, un día, de repente, empezáramos a llevar a cabo todo lo que nos pasa por la cabeza? ¿Cuáles son los límites de lo que está bien hecho y lo que está mal hecho? ¿Cómo sería hacer realidad nuestras fantasías? ¿Hasta dónde llegarías para ayudar a una amiga?
Les Irresponsables es una comedia dramática que habla sobre la amistad. Ese tipo de amistad en la que tus amigas harían cualquier cosa por ti. Cuidarte y quererte seas como seas; aguantando lo malo y, sobretodo, disfrutando lo bueno. No hay distinción en una amistad sin límites. Pero, a su vez, el texto que nos presenta Javier Daulte, juega con las emociones de estas tres mujeres protagonistas que reflexionan sobre los límites de lo que está bien y lo que está mal. Límites que, el público, también llegará a cuestionarse al ver la «fiesta» que se montan en un retiro ideado para curar y pensar.
Javier Daulte nos presenta un texto constantemente cambiante. Un texto basado en la sensatez pero que transita por la locura mediante un viaje muy intenso de emociones. Una comedia a tres donde ninguno de los personajes cojea (bueno, una sí) y donde una frase sencilla puede encender la chispa que haga explotar y explorar una situación aparentemente controlada. Un caramelo teatral que su directora, Sílvia Munt, ha sabido afrontar y moderar a la perfección para que el ritmo no decrezca en ningún momento. Efectivamente, no siempre encontraremos un ritmo alto y dramático (la obra en sí tiene un ritmo cambiante que nos ayuda a pensar sobre lo que estamos observando). Pero el control que Munt impregna en escena para conseguir iniciar este discordante vaivén de emociones es un trabajo exquisito.
Por otro lado, el reto actoral que se presenta es altamente difícil y, se nota que las tres actrices protagonistas (Cristina Genebat, Marta Marco y Nora Navas) se lo han pasado muy bien trabajando. El control de la situación es extremo como extremo son algunos de los momentos que, hilarantemente, vivimos en escena. La combinación que destila el alcohol mezclado con rabia y, acompañado de antidepresivos que esconden sentimientos que no dudan en aflorar, nos presenta una catarsis sin límites con la que jugar. Y ellas juegan muy bien.
Personalidades totalmente distintas, diversas formas de tomarse la vida… Cada personaje es un mundo del que podríamos crear una secuela y, eso, es lo que hace que la historia nos enganche tanto. No solo el personaje en el que se vertebra la razón del suceso es la que impregna las habladurías. En ocasiones, las perlas ocultas que encontramos en los otros personajes resplandecen tanto que cambian la historia en pro de una nueva visión. Algo nuevo que descubrir. Una subtrama de la que tirar del hilo para descubrir un secreto oculto que desea ser revelado.
En la parte técnica, destacar la escenografía creada por Enric Planas y Bulthaup Girona; una torre pija, apartada de la bulliciosa ciudad, llena de todos los lujos posibles que da mucho juego a los delirios de los personajes. Junto a la iluminación de Ignasi Camprodon y el espectacular sonido de Jordi Bonet, hacen del espectáculo un entretenimiento perfecto.
Les Irresponsables nos recuerda que en la amistad todo vale. Que cuidar de los amigos a veces puede ser una bendición y, en ocasiones, un suplicio. Pero, aun así, siempre estaremos ahí para amarlos, cobijarlos y no juzgarlos. Aunque a veces sea prácticamente imposible.
Crítica realizada por Norman Marsà
