Íñigo Guardamino nos quiere como público activo, y no simples espectadores que presencien los avatares de los personajes que se suceden en escena, y Este es un país libre consigue que nos planteemos si somos tan libres como pensamos, o tan solo somos unos pobrecitos que coartamos nuestra libertad por decisión propia.
Quedan pocas funciones para poder acercarse a Nave 73, en Madrid, y dejarse atrapar por el particular universo de Íñigo Guardamino en su última creación, Este es un país libre y si no te gusta vete a Corea del Norte, una comedia negra que nos plantea si los occidentales somos mas libres que la reprimida sociedad del norte de Corea.