Pegados ha vuelto a la cartelera Barcelonesa tras 10 años de su estreno. Kaktus Music se asocia con El Terrat y recupera su gran espectáculo musical como parte de la celebración del 30 aniversario de la productora. El musical cambia los teatros de pequeño formato para transformarse en un musical con un extra de escenografía pero con la misma esencia.
Que el mítico musical Pegados vuelva a la cartelera barcelonesa es de por sí algo que merece ser remarcado con letras mayúsculas, en neón, negrita y con doble subrayado (lástima que nuestra página no lo permita). Y es que ¡no es para menos! Pegados ha sido uno de los musicales de pequeño formato más fructíferos de los últimos diez años. No solo por las innumerables noches y temporadas que ha realizado en la ciudad condal (desde su estreno en el Almeria Teatre con sus creadores como protagonistas y, más tarde, en el recientemente desaparecido Teatro Capitol) o en su gira por territorio nacional; sino también por las exportaciones y licencias que han sido estrenadas en Latinoamérica durante el transcurso de esta década (Brasil, Buenos Aires o Mexico entre otros). Ahora, el musical se presenta en el Teatro Goya de Barcelona.
Pegados, Un musical diferente es la historia de un chico y un chica que se conocen en una discoteca y que por esas cosas de la noche o del destino, terminan consumando el acto sexual en un lavabo. La historia podría terminar aquí, como acaban muchas historias nocturnas de jóvenes, música y alcohol. Pero este chico y esta chica, se encontrarán con un problema con el que no contaban: debido a una extraña pero explicable situación médica, él no consigue sacar su «aparato sexual» del interior de ella. Ante la imposibilidad de separarse deciden ir a un hospital. Y aquí es donde empieza de verdad nuestra historia. El chico y la chica, que estarán literalmente «Pegados», se verán condenados a entenderse y conocerse durante esta larga espera en un box de Urgencias. Una espera que será tensa, alocadamente cómica y por encima de todo, musical.
La historia, basada en una noticia real que los creadores (Alicia Serrat y Ferran González) leyeron en un periódico, basó un musical que se convirtió en mítico en su época. Su base musical positiva, su lenguaje desenfadado y sin tabúes y el magnetismo de los personajes, hacía que el público repitiera varias veces y que instaurara frases de la obra en su subconsciente para ser utilizadas en su día a día.
En aquella época, muchos actores y actrices acompañaron al pianista doctor (Joan Miquel Pérez) y a la enfermera (Gemma Martínez y/o Isa Mateu). Desde la pareja original, Ferran González y Alicia Serrat, pasando por Xenia Reguant, Patricia Paisal, Julia Jové o Xavi Melero. Todos ellos/as dirigidos por Victor Conde y Alicia Serrat en las últimas temporadas.
Ahora, Pegados, Un musical diferente se ha actualizado. Su primera protagonista y co-autora, Alicia Serrat, comparte dirección con Enric Cambray. La coreografía toma más presencia de la mano de Marta Tomasa Worner, el pianista doctor ha sido trasladado a otro centro y lo sustituye Raúl Patiño, la enfermera sigue bajo la bordez absoluta de la mano de Gemma Martínez y los jóvenes pacientes son Júlia Bonjoch e Iñaki Mur.
El nuevo combo de artistas y dirección que encontramos en esta versión 2.0 del musical lo convierte en un espectáculo diferente pero con el alma vieja del espectáculo creado hace más de 10 años. La historia es la misma y las situaciones son las mismas pero sí es verdad que los tiempos han cambiado y el musical, en sí, se ha actualizado.
Empezando por la parte técnica como la escenografía, vestuario e iluminación (Raquel Ibort, Albert Pastor, Crispí Tuset, Josep Font y Vicenç Font), el espectáculo nos muestra un tono más colorido y visual respecto a la luz ténue de hospital que nos encontrábamos anteriormente.
La dirección de Serrat y Cambray es fresca y arriesgada, tratando de mantener la esencia del espectáculo original pero llegando a mostrar un show nuevo distinto y lleno de sorpresas para quienes hayan visto el musical anteriormente.
La coreografía, de la mano de Marta Tomasa, se ha mejorado considerablemente. Si bien es cierto que hay partes de la coreografía inicial que no se han tocado, hay otras que han implementado mejoras constantes que hacen que los números luzcan más. No solo de posturas vive el show.
Y por último, en la parte actoral, Raúl Patiño está perfecto en su papel de pianista doctor. Su juego en la canción «Cae la noche» junto a Gemma Martínez hace que disfrutemos más la escena. Por su parte, Martínez nos presenta una enfermera que nos recuerda a la original pero cuyos cambios en el personaje hacen que su estúpida bordez sea más aplaudida y deseada. Por su parte, Júlia Bonjoch e Iñaki Mur, presentan unos personajes maravillosos a los que quieres y odias por igual. Ella, la más lista y mejor de todas, sabe de todo y, en realidad, todo es fachada. Él, quiere aparentar saber de todo y ser un tío guay pero realmente está más perdido que ella (o no). Ambos intérpretes se apoyan entre sí y juegan sus cartas actorales al límite de las posibilidades para hacernos disfrutar de una historia inverosímil que se nos hace corta.
Aun así, el éxito de Pegados no se encuentra en la historia de cómo dos jóvenes se quedan pegados en el lavabo de una discoteca, sino en todo el trasfondo sentimental que ello muestra. Las inseguridades, la duda sobre el amor y las relaciones personales, el sentido del ridículo, el tratar de agradar a todos, el sentimiento de quererse y/o sentirse querido, el formar un vínculo cercano con alguien, las dudas que jóvenes y no tan jóvenes tienen sobre su vida y su futuro cercano… Temas cercanos que todos/as hemos sentido y que nos hacen comprender profundamente a los personajes sobre la camilla. Un musical sobre la juventud que no debes perderte.
Crítica realizada por Norman Marsà
