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16.06.2016 Nacional  
Alejandro Curiel vuelve a la Sala Hiroshima

En su apuesta por los artistas emergentes, Hiroshima presenta ALL BY MYSELF, la segunda pieza de Alejandro Curiel, artista ya asociado a la sala que presentó con éxito su primer trabajo.

ALL BY MYSELF es una radiografía de la generación nacida en los años 80 y su relación con la soledad y la muerte. Un viaje íntimo y autobiográfico al pasado y al futuro de un chico homosexual a los treinta.

Está acompañado en escena por unos intérpretes que aceptamos como sus amigos, pero que no son más que figurantes en la película de su vida, que generan una imagen de soledad acompañada muy propia de nuestra época.

Curiel utiliza todas las herramientas a su disposición para crear paisajes escénicos para describir una sensación, una emoción. Toda la pieza tiene dos hilos conductores que la atraviesan: los recuerdos de su infancia como homosexual y la historia de los cadáveres de dos amantes descubiertos por un paleontólogo en una excavación. La infancia, la adolescencia, la búsqueda de la belleza física de la juventud y del recuerdo del primer amor bajo una alfombra.

«Ahora todo se consigue con dinero. Todo, menos el amor y alguna otra cosa más que se me ocurre. Puedes matar pagando. Follar pagando. Pero no puede pagar nadie porque te quiera. Al menos no de manera real. El otro puede simular que te quiere por una buena suma, pero ambos sabrán que lo que pasa entre ustedes no es real. Cada vez que te haga un caricia tú estarás pensando en los euros que te está costando que sus dedos toquen tu pómulo derecho o tu antebrazo izquierdo. El gesto se ha llevado a cabo, pero su contenido no se hace efectivo de la manera en que el demandante desea o necesita. En cambio, sí que puedes extender un cheque a alguien para que le pegue un tiro a aquel cabrón al que no puedes soportar. Acabar con la vida de alguien, si te lo propones, es relativamente sencillo. La cosa se complica cuando lo que quieres es compartir esta vida de la que hablo. ¿Qué pasa cuando en vez de terminar lo que quieres es empezar?

Buena Bella Dulce es un conjunto de individuos que se relacionan y entran en diálogo a veces sobre teatro. Otras veces sólo hablan de lo que miran, de lo que ven y de lo que les preocupa. Después intentan convertir todo aquello en imágenes en movimiento. En un proceso de aprendizaje constante, intentan alimentarse de todo aquello que consideran interesante para su desarrollo como futuros artistas: danza, teatro, pintura, escultura, literatura, filosofía, cine, tv, wc, lsd, mdma, etc… Conciben la creación como un proceso aglutinador de experiencia, donde los roles preasignados no cobran demasiada importancia dejando que el trabajo de unos infecte el de los demás.

Alejandro Curiel estudió interpretación en la Escuela de Arte Dramático de Valladolid, completando su formación en danza contemporánea y teatro visual. En Barcelona trabaja como actor y se especializa en dirección escénica en el Instituto del Teatro, colaborando en diversas producciones de pequeño formato. En 2015 comienza a trabajar en su primer proyecto, Buena Bella Dulce, que estrenó el mes de diciembre en la Sala Hiroshima.

ALL BY MYSELF podrá verse en la Sala Hiroshima de Barcelona del 24 al 26 de junio. Entradas a la venta aquí

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