Con una antelación inusitada se ha presentado la próxima temporada del Teatro Real de Madrid. Una programación que pivota de Shakespeare a Barbazul. Joan Matabosch ha desgranado con detalle una temporada que presenta títulos nuevos y grandes hits.
Podemos asegurar que el Teatro Real es posiblemente en estos momentos uno de los teatros más envidiados del orbe. Abriendo en tiempos complicados y estrenando una producción nueva y espectacular de Rusalka de Antonín Dvorák. La apuesta era arriesgada y el éxito es innegable.
Entre los días 12 y 27 de noviembre el Teatro Real ofrecerá 10 funciones de Rusalka, de Antonin Dvořák, en una nueva producción del Teatro Real, coproducida con la Säschsische Staatsoper de Dresde, el Teatro Comunale de Bolonia, el Gran Teatre del Liceu de Barcelona y el Palau de les Arts Reina Sofía de Valencia, en los que se presentará después de su estreno en Madrid.
El Teatro Real presenta la temporada 2020-2021. La presentación, marcada por la pandemia, es una apuesta clara por el regreso a la normalidad. Con muchos interrogantes aún sobre la manera en que se desarrollaran las funciones se ha presentado una ambiciosa temporada que arrancará en septiembre.
El romanticismo ruso llega al Gran Teatre del Liceu de la mano de Anton Rubinstein y Demon. Una pieza muy significativa de su periodo que se estrena por todo lo alto. Título y puesta en escena debutan en la casa y la sensación de asistir a un momento importante de la programación operística de la ciudad nos invade. Tanto por el ejercicio de recuperación como por su valor actual.