Velada bajo la luz de la luna, en una agradable noche madrileña y con el talento y la humildad de la talentosa LUCY LUMMIS, que vuelve al Teatro Galileo acompañada esta vez de un piano y un contrabajo para llevarnos con su voz a parajes del mundo del Jazz y del musical.
LUCY LUMMIS es ya un reconocido nombre en el teatro musical, una voz potente, agradable y con un timbre atinado para el jazz, nos ha querido llevar por un interesante recorrido de conocidos temas de Gershiwn, Cole Porter, Duke Ellington, y algún que otro guiño que ha dibujado la sonrisa en el atento público que ha abarrotado la terraza del Teatro Galileo.
Una puesta en escena sencilla, distinta a la que trajo a Madrid en una anterior ocasión, en la que se hacía acompañar de una Big Band, esta vez LUCY LUMMIS se ha presentado más íntima, más cercana. Ha ido subiendo la intensidad con sosiego, con delicadas versiones y con gran mano izquierda le ha ido robando protagonismo a la luna que brillaba encima del escenario.
Se ha hecho acompañar por María Blanco y por Víctor González en dos de los temas del recital, nos ha regalado un tema en español del musical Sister Act, y ha conseguido momentos de intimidad y emoción. Por momentos parecía que por detrás del escenario iban a aparecer los neones de las calles neoyorquinas, o la humedad y el olor característico de las calles de la cuna del Jazz, New Orleans.
Todo un regalo el que ha brindado LUCY LUMMIS esta noche a todo el que ha querido acercarse a la terraza del Teatro Galileo. No le pierdan la pista a esta entrañable rubia. Promete con su voz llevarnos a sitios maravillosos. Sólo hay que dejarse llevar.
Crítica realizada por Moises C. Alabau
