novedades
 SEARCH   
 
 

05.07.2016 Teatro  
Celebramos en el Raval la solución a 101 asesinatos

El pasado lunes 27 de junio, los amigos del Teatre del Raval nos invitaron a celebrar con ellos su final de temporada de TESTIMONI DE CÀRREC. La obra, basada en la novela de la famosa escritora británica Agatha Christie y de la cual Billy Wilder también hizo una película (Witness for the Prosecution) allá por el año 1957, cumplía 100 funciones.

Como en todas las novelas de la famosa autora nos encontramos frente a un asesinato, un puñado de personajes que protagonizan la historia y que suelen ser igualmente sospechosos y la persona que, después de analizar hasta el mínimo detalle, suele resolver el caso de forma efectiva. Curiosamente, en esta ocasión, no es ni el famoso Hercules Poirot ni la Srta. Miss Marple (los detectives más recurrentes de la Christie) los que intentarán resolver este caso. Esta vez es un abogado criminalista de renombre en el Londres de la época quien se encargará de defender al acusado hasta la resolución final de la historia.

Para los que somos amantes de los casos de esta autora (y me incluyo a mi y a mi hermana, quien me acompañaba), encontramos que es un lujo poder disfrutar de las recreaciones de tantos y tantos libros que hemos leído de ella. Pero si a ese lujo se le suman unas potentes interpretaciones, un vestuario sobresaliente y un atractivo ritmo en cada escena, en el que el público se siente parte de la obra, entonces, ese lujo pasa a ser un pequeño tesoro que no os podéis perder.

Todos y cada uno de los actores que componen el elenco están perfectamente seleccionados, no solo por su excelente dicción, gran presencia en escena y fuerza en la interpretación, sino porque además (aunque esto que vaya a decir parezca que debiera ser lo natural en toda obra), cada actor está físicamente escogido para que represente (visualmente hablando) a la perfección el papel que cada uno interpreta. Tengo que decir que después de un tiempo ya viendo teatro, no siempre esto se consigue. Pero TESTIMONI DE CÀRREC te transporta a la Gran Bretaña de las novelas, a esos policías, asesinos, abogados y jueces que rondaban las historias y las calles del Londres de aquel tiempo.

Creo que todos desempeñan con extraordinario arte su parte, pero ese Jordi Coromina en el papel de Sir Wilfried, el abogado recién salido del hospital debido a un reciente ataque al corazón, junto a la insoportable y empalagosa Srta. Plimsoll, interpretado por Muntsa Tur, la enfermera que le acompaña día y noche y Empar López, como Romaine Vole, la alemana esposa del acusado son papeles que me robaron el corazón. Aunque insisto, no hay uno de los actores que no esté por encima de la altura que se espera en un clásico como este.

TESTIMONI DE CÀRREC ha sido un éxito, y con toda la razón del mundo. Como fue un éxito también el cava y la fondue de chocolate que nos tomamos al finalizar la función, gentileza de Mont Marçal y Godiva.

Así que con toda razón y después del merecido descanso, en septiembre vuelven a la carga con nueva temporada, en el mismo Teatre del Raval. Yo prometo repetir, y esta vez haré de jurado. ¿Y ustedes? ¿Se lo van a perder? Si Agatha Christie levantara la cabeza, estoy segura de que ella no se lo perdería…

Crítica realizada por Diana Limones

Volver


CONCURSO

  • COMENTARIOS RECIENTES