Nos situamos en la década de los 70. Ambas calles, la de Castro y el de Sunnydale, son calles de la ciudad de San Francisco. El primero es el icono del movimiento libertario homosexual; el segundo es un lugar cualquiera del sur de la ciudad, un lugar humilde donde han nacido los protagonistas de HOME SWEET HOME.
HOME SWEET HOME es la historia de cuatro hermanos con cuatro realidades muy distantes pero que a pesar de las desavenencias se esfuerzan por mantener el núcleo familiar intacto. Cada uno tiene que convivir con sus dificultades y cada uno modela a la percepción del mundo su manera para salir adelante: responsabilidad de crecer sin los padres, el omnipresente sueño americano para conseguir la vida deseada, las desigualdades sociales, la revolución de la época para ganar derechos y libertades … Una serie de temas que marcarán el paso del tiempo y las relaciones entre los cuatro hermanos.
El público empatitzarà con ellos de la mano del hermano menor, el inocente Timothy, el cual tiene su propia visión de la realidad y distorsiona su recuerdo para tener lo que se supone que todos los niños deberían tener: un infancia feliz. A través de su punto de vista del espectador irá descubriendo, paso a paso, cuál es la realidad la familia Parks.
En los años 60 el barrio Castro era un barrio obrero con muchas fábricas, pero estas poco a poco se fueron trasladando a otras zonas para abaratar costes y muchas casas se quedaron vacías porque familias enteras marchaban de la zona. Coincidiendo justo esta época con la aparición del movimiento hippie, los jóvenes defensores del amor y la libertad se instalaban en este barrio aprovechando que los precios de las casas eran muy asequibles. Cuando en los años 70 llega la revolución del colectivo homosexual, estos también acaban asentándose en el barrio Castro. Aquí es donde aparece el factor histórico que inspira HOME SWEET HOME: Harvey Milk. Nacido en Nueva York, Harvey Milk acaba viviendo en San Francisco por su condición de homosexual. Una vez afincado en el barrio Castro, 1977 se convierte en el primer político abiertamente gay elegido en un cargo público en Estados Unidos. En menos de un año fue asesinado por esta razón, convirtiendo la calle Castro, San Francisco y él mismo en iconos del activismo en defensa de los derechos LGBT.
A partir de este contexto, e inspirada en un hecho histórico que ha marcado un antes y un después, La Utópica pretende reconocer conflictos universales y atemporales que el espectador puede relacionar con su vida actual y local.
La crisis económica y las dificultades para sacar la familia o a uno mismo adelante, las desavenencias familiares maquilladas para almuerzos de domingo, como los niños son los que unen la familia, como la familia se convierte en una carga asumida, las diferencias ideológicas en el seno del núcleo más cercano, el dolor de no poder ser uno mismo por el miedo a ser criticado y menospreciado, la lucha por hacerse respetar como estamos educados socialmente y cómo afecta esto a nuestro comportamiento…
HOME SWEET HOME puede verse en la Sala Porta 4 de Barcelona los días 5, 12, 19 y 26 de junio a las 21h. Entradas a la venta aquí