El maestro César Belda dio el pistoletazo de salida, y la pequeña banda de piano, guitarra, bajo y batería comenzó a tocar los compases iniciales de “En mi corazón (You’ll be in my heart)” del “Tarzán” de Phil Collins. Un momento después, al público del Barts nos llegaba una voz clara y potente, y Daniel Diges salía a escena para presentar el primer tema de su CALLE BROADWAY.
El nuevo disco de Diges, que defiende ahora en su gira de conciertos, suma los dos mundos por los que es conocido, la música y los musicales. La canción que abrió la noche, por tanto, no podía ser más adecuada: un tema escrito por un músico de pop-rock, nacido para una película, y posteriormente llevada a los escenarios. El setlist estaría trufado de ese tipo de canciones, no en vano el jukebox es uno de los modelos dominantes en los musicales de hoy en día. “Aire” de Mecano/”Hoy no me puedo levantar”, “Unchained Melody” de los Righteous Brothers/”Ghost”, “Yo quiero salir (I want to break free)” de Queen/”We will rock you”, “Va todo al ganador (The winner takes it all)” de ABBA/”Mamma Mia”…
CALLE BROADWAY, como se puede comprobar, incluye varios temas que han sido importantes para la carrera escénica de Daniel Diges. No obstante, el artista no se ha limitado a cantar canciones conocidas con los arreglos clásicos, sino que en manos de Daniel Ambrojo ha creado nuevos arreglos para algunos de los temas. Esta experimentación tiene sus riesgos, y por ejemplo el toque “jazz” no le acaba de sentar bien al “María” de “West Side Story”, pero es que mejorar a Bernstein es complicado.
Tras esta primera parte del concierto, las dos coristas de Diges se marcaron un fenomenal “It’s raining men” (“one-hit wonder” de las Weather Girls que prcedía por salir en “Priscilla, la reina del desierto”). Teresa Abarca, además, bailó junto a Diges en “Maria” e hizo el papel de Christine en “Fantasma de la ópera” como Ruth Lorenzo en el disco. Teresa Ferrer le hizo el duo en “Unchained Melody”, en lugar de Lara Alcázar. Las dos coristas hicieron muy buen papel durante toda la noche, animando al público, participando de las bromas (y “bromas”) de Diges y dejando la sensación de que también nos encantaría verlas en concierto, en solitario.
CALLE BROADWAY despliega la voz de un artista que podría cantar lo que quisiera pero que ha elegido el musical porque es lo que más le llega al alma. Entre los temas con los que se ha quedado Daniel Diges hay variedad de tonos e intensidades, siempre dentro del Broadway más comercial, pero hay ocasiones en las que se nota que está verdaderamente cómodo y es entonces capaz de desplegar sus puntos más fuertes: allí donde puede dar rienda suelta a su potencia, Diges brilla apoteósicamente.
Sin embargo, los años le están dando amplitud de registro (y no hablo sólo del tono de la voz): “Memory” de “Cats” o “Tráemelo (Bring him home)” de ”Los Miserables” se han convertido ahora ya en estrellas del repertorio de Diges. “Seasons of Love” de Rent, “No importa la distancia” de “Hércules”, un interactivo “Quiero ser como tú” de “El libro de la selva” y el eurovisivo “Algo Pequeñito” (con participación sorpresa de Santiago Segura) ocuparon la mayor parte de esta segunda mitad.
Hubo algo más, sin embargo. Para empezar, un medley que no se encuentra en el disco, con fragmentos de casi 20 temas de los musicales más variados: “Annie”, “Sonrisas y lágrimas”, “Mary Poppins”, “La Bella y la Bestia”, “Aladdin”, “La Sirenita”, “El rey león”, “Los miserables”, “Cantando bajo la lluvia”, “Spamalot”, “Mamma mia”, “Fiebre del Sabado Noche”, “Jesucristo Superstar”, “Moulin Rouge”, “Hair”, “High School Musical”, “Hoy no me puedo levantar”, “Sister Act” y “Grease”. Y para terminar, dos bises estupendos: un “Superstar” con un aire de mashup, y “Can’t get my eyes off you”, de “Jersey Boys”. Al llegar aquí, el público ya estaba enfebrecido, con Diges pasando por todo el teatro y cantando junto a la gente puesta en pie.
Daniel Diges comenzó el concierto siendo para algunos “el chico de Eurovisión”, para otros “el de Tu Cara Me Suena y los chistes mal contados” y aún para otro grupo “ese actor de musicales”. Pero a lo largo de la velada se fue transformando la percepción de todos: para cuando llegaron los bises, Daniel Diges era un muchacho entrañable con una voz de oro, alguien del que nos costaba despedirnos, alguien al que queríamos seguir oyendo, no necesariamente cantar. Daniel Diges se hace querer. Y eso, más que un éxito de ventas, es el verdadero éxito. Bravo por Diges: queremos más de eso que nos das, queremos más musicales, queremos más de ti.
Crítica de Marcos Muñoz