El Teatre Coliseum de Barcelona estrenó esta semana Humans 2.0; el último espectáculo de la prestigiosa compañía australiana Circa. La danza contemporánea, el teatro físico y el circo se funden en este nuevo espectáculo creado por Yaron Lifschitz que, a través de una sinfonía de acrobacias, sonido y luz eleva el arte circense contemporáneo a un nivel superior.
El pasado miércoles 17 de enero, la compañía australiana Circa desembarcaba de nuevo en la ciudad condal para presentar su último espectáculo, Humans 2.0; un show nuevo y refinado de circo atlético y estético con una dramaturgia de movimiento cuidadosamente elaborada creada por Yaron Lifschitz, acompañada por la enérgica música de Ori Lichtik, la magnífica iluminación de Paul Jackson y el sorprendente vestuario de Libby McDonnell.
Humans 2.0 es la secuela evolucionada de Humans; un show que se presentó en el Festival de Sidney en 2017 y que constituye un desafío a las leyes físicas que los diez intérpretes de este espectáculo convierten en una coreografía de acrobacias y resistencias. Un drama físico lleno de poesía que nos demuestra que, el cuerpo humano, puede ofrecer capacidades casi sobrehumanas que no esperamos. Una exhibición de acrobacia y coreografía de primer nivel que celebra la fuerza vital junto a un espectáculo de sinfonía de luz y sonido.
La creación de Lifschitz está dividida en varios movimientos que imprimen un estado de ánimo diferente y que se combinan con emociones sonoras y visuales para fascinar al respetable. No fue hasta bien entrada la función, digamos que hacia mitad de la misma, que alguien del público se atrevió a aplaudir las hazañas que disfrutábamos en escena; rompiendo así la tensa y sorpresiva sensación creada en la sala desde el inicio del show.
Durante los setenta minutos que escasamente dura Humans 2.0, pudimos ver como el público disfrutaba en absoluto silencio y admiración de las constantes creaciones que el equipo de Circa erigía en el escenario. Torres humanas, saltos, contorsiones y demás expresiones de fuerza, son llevadas al límite por estos 10 artistas que, como titanes, no descansan un minuto. Una compleja y sorprendente coreografía que, en ocasiones, congela nuestro aliento para sorprendernos aun más si cabe.
Pero si algo sorprendió al público asistente, fue la mezcla orgánica que Circa presenta en escena. Junto a la gracia humana de la superación corporal, la escenografía, la música y la iluminación supusieron un punto de referencia para comprender un show lleno de momentos íntimos y bellos.
Circa es una compañía que está en la vanguardia de la nueva ola de circo australiano contemporáneo. Una compañía que ha sido pionera en llevar al límite la expresión física para crear actuaciones poderosas y emotivas, de una manera que desdibuja las fronteras entre danza, teatro y circo. Un canto a la belleza humana que deslumbra.
Crítica realizada por Norman Marsà
