El Rey León, el musical más longevo de Disney, cumple 12 años en cartel (13 temporadas) en el Teatro Lope de Vega de Madrid. Desde EnPlatea no hemos querido perdernos la oportunidad de felicitar al equipo por esta hazaña y, obviamente, nos hemos sentado de nuevo en la butaca, muy cerquita de la sabana, para disfrutar de un show que sigue siendo mágico.
Para quien no lo conozca (algo que, realmente, dudo muchísimo), El Rey León es un musical basado en la película homónima de Disney de 1994, con libreto de Roger Allers e Irene Mecchi, canciones de Elton John y Tim Rice, y música adicional de Lebo M, Mark Mancina, Jay Rifkin, Julie Taymor y Hans Zimmer. Dirigido originalmente por Julie Taymor, el espectáculo está producido por Disney Theatrical y se caracteriza por el empleo de máscaras de animales y marionetas de gran tamaño para representar a los diferentes personajes.
Si nos remontamos a sus inicios, la producción original de Broadway se estrenó en 1997 y, desde entonces, el musical ha sido puesto en escena en numerosos países a lo largo de todo el mundo, llegando a sobrepasar la cifra de 30 producciones repartidas alrededor del mundo. Entre ellas, se encuentra la producción Española estrenada en 2011 y afincada en el Teatro Lope de Vega de Madrid.
Doce años en cartel (que se dice pronto), hacen que El Rey León siga reinando en la sabana de teatros de la capital española, convirtiéndose en el dueño y señor de la Gran Vía Madrileña. Un hito que nunca antes había ocurrido en nuestro país y una hazaña difícilmente a superar por sus competidores. Y es que, el cariño que todos tenemos por El Rey León El Musical es algo casi inabarcable. Los que vimos la película deseábamos que llegara este momento teatral y, ahora, años después, somos los mismos que acudimos en sus inicios, quienes traemos a nuestros hijos a disfrutar de una momento tan especial que nos hace conectar profundamente con la familia. Y es que, el musical, sigue llenando noches y butacas gracias a este círculo vicioso generacional. Yo quiero que mi hijo, mis allegados y mis amigos disfruten como yo he disfrutado de esta historia que, trasladada al teatro, ofrece una nueva perspectiva de la historia con la que empatizar.
El Rey León El Musical se desarrolla en África y su historia bebe de inspiraciones de las historias bíblicas de José y Moisés, pero, sobretodo, de la gran obra de William Shakespeare: Hamlet. Así, cuenta la historia de Simba, un joven león que tras la muerte de su padre, rey de Pride Lands, es exiliado de su hogar por su tío, que usurpa el trono. Esta simple historia que tanto hemos visto replicada en películas, obras teatrales y espectáculos varios, toma un nuevo significado cuando Julie Taymor encontró la forma de llevarla a los escenarios de Broadway. Una nueva vida para una historia que tanto marcó a los niños y que, ahora, iba a marcarlos de vuelta con una espectacularidad sin igual.
Actualmente, El Rey León en Madrid está magistralmente interpretado por un elenco que nos hace soñar. Pitu Manubens es Scar, Lindiwe Mkhize es Rafiki, Victor Manuel Nogales es Mufasa, Juan Bey es Zazú, Nacho Brande y Ramón Balasch son Timón y Pumba, Dianne Kaye y Agustín Argüello son Nala y Simba, Núria López es Sarabi y, el trío formado por Yelena Lafargue, Pepe Nájera y Carlos Salgado son Shenzi, Ed y Banzai, las tres despiadadas hienas. Junto a ellos, un gran elenco de actores, cantantes y bailarines (39 personas adultas forman el elenco junto a un total de 14 niños y niñas que rotan en los personajes de Nala y Simba), todos dirigidos por el director residente, Zenón Recalde, representan cada tarde/noche una historia que se ha convertido en universal.
Pero el mérito del show no acaba con ellos. Otros departamentos como maquillaje, peluquería, sastrería, vestuario, puppets, escenografía, etc… todos y cada uno de ellos, cuidan a la perfección un espectáculo que puede durar años. Junto a la orquesta, dirigida por Sergi Cuenca y formada por 15 músicos en directo, estos departamentos nos trasladan rápidamente a la historia cuando vemos aparecer a Rafiki en escena y lanza su primer grito. En ese momento, todos los departamentos en conjunción hacen que se nos erize la piel, el bello se nos ponga de punta y la lágrima nos caiga por la mejilla desbloqueando un recuerdo de la infancia que amamos rememorar.
Disfrutar de El Rey León El Musical es una gozada. Aunque pienses que ya has acudido a verlo y lo has disfrutado, una segunda vez hace que el nerviosismo reaparezca, que la piel se te erice al verte sentado en el teatro esperando que el show comience y que, cuando las luces se apaguen, tu «yo adulto» desaparezca dejando paso al niño interior que tanto disfrutó con esa película en VHS puesta en bucle en el televisor de casa. Solo podrás pensar: ¡Larga vida al Rey!
Crítica realizada por Norman Marsà