Ópera de Tenerife presentó Der Zwerg (El enano), ópera contemporánea de un acto, compuesta por Alexander von Zemlinsky e inspirada en un cuento de Oscar Wilde. Este montaje, representado en el Auditorio de Tenerife, ha sido fruto de una coproducción junto a Opéra de Lille, Opéra de Rennes, Fondation Royaumont y Théâtre de Caen.
El enano es la obra más emblemática del autor austriaco Alexander von Zemlinsky, a quién recientemente se ha empezado a redescubrir. La historia pretende, quizás como el relato de Wilde, hacernos meditar en que la belleza externa no significa nada cuando en el interior esta no existe, y tanto más cuando carecemos de empatía e ignoramos el sufrimiento de los que nos rodean.
La historia comienza con los preparativos para la celebración del decimoctavo cumpleaños de la infanta Donna Clara. Un sultán envía un enano como regalo y este, sin ser consciente de su desagradable aspecto físico, se encandila con la infanta. Donna Clara, conocedora del interés de él, juega cruelmente con sus sentimientos y mediante artimañas hace que el enano vea por primera vez su propio reflejo en un espejo. Con el corazón roto tras el rechazo de su amada, muere mientras la Infanta regresa a la fiesta.
Ópera de Tenerife ha afrontado el reto de presentar un título sumamente singular, ya que existen muy pocas representaciones de esta obra. Pero este hecho no ha impedido que se montara dicha representación, sino que, más bien y al no haber apenas referencias en las que apoyarse, ha sido un factor vital para que todo el equipo lo haya aceptado como una oportunidad única de crear una escenificación y montaje musical y vocal con total libertad en la creación.
Así lo sintió y expresó, batuta en mano, el maestro Alessandro Palumbo, quien, como es ya habitual, captó como nadie la complejidad de la pieza y transmitió ese sentir con gran solvencia y destreza a los miembros de la Sinfónica de Tenerife. Por su parte, la Sinfónica volvió a exhibir su gran talento, oficio y capacidad de adaptación.
La soprano Mojca Erdmann, en el rol de la infanta Donna Clara, demostró con su hermosa voz poseer una técnica limpia y una capacidad interpretativa bastante creíble. Destacó especialmente en las escenas compartidas con el tenor Mikel Atxalandabaso, quien a su vez, nos conmovió con su interpretación desgarradora del malogrado personaje protagonista, manifestando una gran proyección en la voz. Un momento a destacar por su alto nivel interpretativo y en el que Atxalandabaso provocó pura emoción, es la escena en la que este descubre su imagen en el espejo.
La soprano Beatriz Díaz, en el papel de Ghita, la dama de compañía de la infanta, mostró un gran nivel tanto en la voz como en la interpretación, especialmente hacia el final, cuando con gran fuerza y emoción nos hizo partícipes de su pesadumbre al ver el sufrimiento del enano. Como contrapunto, encontramos a Don Estoban, el frío chambelán del palacio, interpretado por el bajo-barítono Philipp Jekal, quien otorgó a su personaje de gran presencia a pesar de tratarse de un papel secundario.
Acompañando al elenco y dirigidas por Carmen Cruz, pudimos disfrutar de una magnífica exhibición de treinta voces femeninas del Coro titular de Ópera de Tenerife-Intermezzo, quienes completaron esta puesta en escena dramática de forma brillante.
En los aspectos más técnicos, cabe destacar el gran trabajo de Daniel Jeanneteau en la creación de una escenografía magnífica y sorprendente. También la diseñadora de vestuario Olga Karpinsky creó unas deliciosas prendas de cuento de hadas para la infanta y sus doncellas, en contraste con el atuendo regio y sin colorido tanto del servicio de palacio como del mismo enano, a quien vistieron con ropa vulgar y corriente, en un intento acertado de resaltar su fealdad.
Der Zwerg (El enano) puede no ser considerada entre las más bellas óperas dentro del mundo de la lírica, pero definitivamente, y como es ya tradición, Ópera de Tenerife y todos los implicados en este montaje, han creado una representación digna de su bien merecida gran reputación.
Crítica realizada por Celia García