Oliver Dubois, considerado el enfant terrible de la danza contemporánea, y con gran proyección internacional, presenta Auguri en el Mercat de les Flors del 23 al 25 de noviembre. La pieza cierra su trilogía sobre la búsqueda de la felicidad.
La nueva creación de Dubois cierra la etapa “Étude critique pour un trompe l’oeil». Durante 7 años, el coreógrafo ha creado las cuatro piezas que componen este ciclo. Los bailarines participantes realizan movimientos explosivos y desenfrenados que dan lugar a un estallido de júbilo y ansiedad. Auguri es una pieza intensa, bella e inteligente que se estrenó en la Biennal de Lyon.
Con Auguri, Dubois lleva al límite a los cuerpos de sus bailarines, con un espectáculo en el que tanto los intérpretes como los espectadores pierden el aliento. 22 bailarines del Ballet du Nord atraviesan el escenario a gran velocidad en un zigzag hipnótico que lleva a los cuerpos al extremo. El coreógrafo es también director del Ballet du Nord – Centre Chorégraphique National de Roubaix Nord-Pas de Calais desde 2014. En su currículum consta que ha bailado para coreógrafos como Jan Fabre o Sasha Waltz. Su excepcional trayectoria internacional cuenta con su aportación como coreógrafo, intérprete y pedagogo y en 2011 fue elegido como uno de los 25 mejores bailarines del mundo.
Acompañado por la música hipnótica de François Caffenne, durante 60 minutos los “derviches corredores”, los 22 bailarines del Ballet du Nord, atraviesan el escenario a toda velocidad. Sus trayectorias son lineales y zigzagueantes, con cambios bruscos de dirección. Algunos trazan largas curvas, otros describen itinerarios sinuosos como si se tratara de un slalom. Corren sin que sepamos hacia dónde ni el porqué. A veces chocan, dulce o brutalmente. A veces uno ralentiza su carrera, otro acelera… A veces, un bailarín alza a una bailarina, pero esta figura no dura más de un segundo y cada uno reemprende su alocada carrera. Un efímero grupo se forma, tres bailarines corren en la misma dirección par, después, como partículas de mecánica cuántica, desaparecer.
Auguri es un fresco que toma elementos prestados de lo divino y lo pagano. Una coreografía para perder el aliento. Una danza basada en la interpretación física de los bailarines, que no corren por una medalla o un récord. El espectador, a medida que avanza el espectáculo, corre com ellos, sufre y expira con ellos.
Auguri se puede ver del 23 al 25 de noviembre. Puedes conseguir tu entrada en la web del Mercat de les Flors.