Incògnit es una de esas obras que merecen ser reprogramadas de tanto en tanto, entre otras cosas, por una temática que no pasa de moda. El estudio de nuestro cerebro, de nuestra mente y de la necesidad latente del ser humano de poseer su propia identidad son cosas de las que se hablan en esta obra de Nick Payne y que se puede ver estos días en el Teatre Lliure de Barcelona.
La Sala Beckett inicia el ciclo “Les condicions del cervell” con una lectura semi-escenificada de una pieza de Nick Payne. Mònica Bofill traduce y dirige Incògnit, un texto emotivo y divertido a partes iguales que se convierte en certera amalgama de terminología científica y filosófica y las batallas cotidianas de dos decenas de personajes durante varias décadas.