El Teatre Nacional de Catalunya en Barcelona pone en escena Terra Baixa. Hasta aquí, cero sorpresas. Pero su directora Carme Portaceli, y el adaptador Pablo Ley, han actualizado el clásico de Àngel Guimerà convirtiéndolo en un thriller histórico y el resultado puede ser lo mejor que le ha pasado al teatro catalán en muchos años.
Me quedé sin ver Jauría por culpa de la pandemia, así que he hecho lo posible por no perderme el juicio a la gestión de la misma en cuanto he podido. Jordi Casanovas estrena en La Villarroel, dentro del marco del Grec Festival de Barcelona, Immunitat que podrá verse hasta final de mes en la sala de referencia de Barcelona.
Fruto de la colaboración del Pavón Kamikaze y la Sala Beckett nos llega esta Andrea Pixelada. Un sugerente título que esconde una historia de una millenial de éxito con más claroscuros que luces. El poder de las redes y el engañoso mensaje que transmiten. Adultos intentando hacerse con los mandos y jóvenes inexpertos.
La Sala Beckett continúa desplegando la parrilla del ciclo Res no és mentida y confía en Cristina Clemente y su obra Andrea Pixelada. Una co-producción con El Pavón Teatro Kamikaze y el Teatre Principal de Palma que demuestra la gran capacidad de la autora para construir personajes consistentes y para superponer distintas capas narrativas.
Vuelve Josep Mª Miró, después del ciclo de obras que presentó en la sala Beckett el año pasado, y esta vez lo hace a lo grande en el Teatre Nacional de Catalunya. En su línea habitual, donde arquitectura y paisajes se dan la mano como temas centrales de sus obras, en Temps salvatge nos ofrece una visión sobre la vida y los miedos y autoengaños que nuestro sistema nos presenta.
Josep Maria Miró estrena su nuevo texto en la Sala Gran del Teatre Nacional de Catalunya. Del 10 de mayo al 17 de junio podemos ver la cara oscura de una comunidad que se enfrenta a sus peores miedos. Un montaje de gran formato dirigido por Xavier Albertí y que cuenta con un reparto repleto de nombres destacados de nuestra escena.
El Teatre Romea se convierte en una suerte de foro romano para acoger la puesta en escena de Calígula que Mario Gas ha realizado a partir de la inquietante y estremecedora visión sobre el personaje con la que Albert Camus sacudió el arte dramático allá por 1944.
El Teatro Romea acoge la recta final de una proyecto teatral que ha gozado de dos años de vida sobre los escenarios. La capacidad de convocatoria de la propuesta está fuera de toda duda pero, a día de hoy, sigue sorprendiendo tanto la validez del discurso del personaje protagonista como la aproximación que se hace del mismo.
Hace ya dos años que se está promulgando la misma sentencia de muerte a uno de los filosofos griegos con más repercursión de la Historia. Conocido como el padre del pensamiento occidental y maestro de Platón, en Sócrates, Juicio y muerte de un ciudadano, nos presenta las últimas horas de este pensador, antes de encontrarse con la muerte por envenenamiento con cicuta.
Josep Maria Pou, reciente ganador del Premi Gaudí d’Honor Miquel Porter, se vuelve a poner en la piel de SÓCRATES en el Teatre Romea. Durante siente semanas, a partir del 10 de marzo, tendremos una nueva oportunidad de disfrutar de una puesta en escena que ya ha sido vista por más de 60.000 espectadores.