El Teatre Akadèmia de Barcelona inicia los últimos días de Sucia; un espectáculo que dramatiza una experiencia real de Bárbara Mestanza, dramaturga y protagonista (junto a Pep Ambròs) de una pieza que defiende el arte del teatro como medio de investigación legítimo. Una obra dura que trata el abuso de frente en una sociedad que sigue mirándose el ombligo.
Directo desde el Teatre Lliure llega a Madrid, al Teatro María Guerrero, Yerma de Federico García Lorca; con dirección de Juan Carlos Martel Bayod y la multipremiada María Hervás como protagonista.
La temporada madrileña debería ser celebrada por haber acogido La mujer más fea del mundo en las Naves del Español y Sucia en el Teatro de la Abadía, simultáneamente, siendo una celebración de la mujer, de la irreverencia y de sus autoras Bárbara Mestanza y Ana Rujas.
Bàrbara Mestanza nos sitúa con valentía y claridad en el Teatro de la Abadía (Madrid) frente a la realidad de los abusos sexuales. Un relato en primera persona sobre aquello a lo que menos atención prestamos, a cómo se sintió la víctima cuando la violentaban, cómo convivió en silencio con aquel dolor y cómo fue el proceso de darlo a conocer.
Todas las flores es una creación de Laia Alberch, Judit Colomer, Bàrbara Mestanza y Carla Tovias. Es una obra de teatro-manifiesto (o un manifiesto hecho obra de teatro) dedicada a nosotras, pero que mira a los ojos de todos y que se puede ver durante todo este mes, y hasta primeros de octubre, en la Sala de baix de la Sala Beckett del Poblenou de Barcelona.
La Sala Beckett estrena Todas las flores y por fin salimos del abismo teatral. Una pieza grande en el sentido más amplio de la palabra. Un grito doloroso y no embellecido. De estética oscura y poética capaz de (re)crear nuevas relaciones entre conceptos. De (re)plantear, desde una ciencia ficción no sexualizada y de fuerte impacto ideológico y visual, la nueva masculinidad.
El ambigú del Teatro Kamikaze se inunda de una peculiar fealdad. La mujer más fea del mundo es un alegato incómodo sobre la perversión de los cánones impuestos. Ana Rujas se enfrenta a un monólogo que lanza dardos y recibe lágrimas. Atinada reflexión que combina dolor y denuncia.
La Sala Beckett ha presentado su programación para la temporada 2019-2020. Coincidiendo con el 30º aniversario de su apertura en Gràcia, las distintas propuestas se incluyen dentro de un único ciclo dedicado a la muerte. Denise Duncan será la autora residente y también se hará especial hincapié en la figura de Samuel Beckett.
La Sala Beckett ha incluido dentro del ciclo Res no és mentida la última y reaccionaria propuesta de Bàrbara Mestanza. Pocahontas o la verdadera historia de una traviesa supone una apasionante posibilidad de zambullirnos en un universo coceptual y expresivo que sanea y a la vez detona nuestro actual panorama escénico de un modo tan poético como rotundo e incendiario.
La Sala Atrium apuesta fuerte con La mujer más fea del mundo. La compañía La otra bestia nos golpea con una propuesta que se convierte en un certero proyectil contra la sobrexposición embellecida de nuestro vacío existencial. Una pieza que aprieta hasta desmoronar el más mínimo resorte de ese poder dominante al que servimos y que nos tiraniza desde las entrañas.