El Temporada Alta (Festival de Tardor de Catalunya) ha presentado su programación para la edición de 2016. Un total de 100 espectáculos (33 estrenos absolutos), 28 espacios escénicos y 9 poblaciones conforman el mapa artístico y demográfico de la muestra.
El evento ha tenido lugar en el Teatre Municipal de la capital catalana y también se ha podido seguir en streaming desde la web de la Televisió de Girona. Tras la introducción, durante la que se ha presentado el spot del Festival, Salvador Sunyer ha desgranado las distintas propuestas teatrales. Música, danza y circo adquieren un protagonismo importante. Como es habitual, la creación contemporánea será el estandarte sin olvidar al público familiar ni a las iniciativas audiovisuales y las distintas actividades paralelas que se realizarán en torno a la programación.
El teatro internacional será uno de los dos pilares fundamentales, con 30 espectáculos. Nos encontraremos con veteranos y habituales como Peter Brook (que retomará “Battlefield”); Krystian Lupa (que volverá al universo de Thomas Bernhard dirigendo por primera vez un espectáculo con actores catalanes en “Davant la jubilació”, con Marta Angelat, Mercè Arànega i Pep Cruz) o Thomas Ostermeier (“La mouette”). Junto a ellos, renovadores del lenguaje escénico como el lituano Oskaras Koršunovas (“Cleansed”) o Guy Cassiers (“De Wellwillenden”) compartirán cartel con un amplio abanico de propuestas iberoamericanas.
La autoría catalana será la otra columna fundamental como demuestra su presencia en 61 de las propuestas. La mirada hacia fuera vendrá propiciada desde las distintas comarcas gerundenses y los 26 artistas autóctonos que participarán en la presente edición. Lluís Pasqual estrenará “In memoriam. La quinta del biberó” y Àlex Rigola hará lo propio con “Who Is Me. Pasolini – El poeta de las cenizas”. Los jóvenes dramaturgos y artistas también encontrarán su espacio en la parrilla de esta edición.
El Festival no ha olvidado en su programación espectáculos que ya han alcanzado el éxito de público y crítica como “Psicosi de les 4:48”; “Acorar”, “Terra Baixa i Lluís Homar”, “Caiguts del cel” o la propuesta de Xavier Bobés “Cosas que se olvidan fácilmente” que admite un aforo total de cinco espectadores por representación.
Además, se ha explicado el doble eje sobre el que se quiere trabajar para acercar la Cultura al espectro social más amplio posible, focalizando esfuerzos en los distintos grupos con riesgo de exclusión y en la educación como crisol del sentimiento de pertenencia e identificación con unos valores e ideas cohesionados en un ámbito de libertad. De nuevo, se ha destacado la vocación multidisciplinar del Festival, que este año incluye la proyección del documental “El testament de la Rosa”, de Agustí Villaronga, en recuerdo de la fenecida actriz Rosa Novell, presente y admirada en varias ocasiones durante la historia del mismo.
Entre otras aportaciones, Sunyer ha realizado un breve balance de los veinticinco años en los que el Festival se ha consolidado como referente nacional e internacional gracias a los 1.300 espectáculos, 10.000 artistas y 700.000 espectadores que lo han hecho posible. En su constante reflexión sobre la utilidad de la cultura, el director artístico ha estado acompañado por Marta Madrenas (alcaldesa de Girona); Antoni Vilà (Diputación de Girona); Jordi Viñas (alcalde de Salt) y Santi Vila (concejal de Cultura de la Generalitat de Catalunya).
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