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30.05.2022 Críticas  
Todo es cuestión de perspectiva

Durante dos exclusivos fines de semana, el Ballet de Barcelona ha presentado su último espectáculo, Perspectives, en el Teatre Condal de Barcelona. El espectáculo que originalmente se creó para ser representado el pasado verano en el Festival Castell de Peralada está basado en la historial personal de su director artístico Chase Johnsey.

El Ballet de Barcelona ha presentado durante dos fines de semana consecutivos, en el Teatre Condal de Barcelona, su espectáculo Perspectives. Un espectáculo basado en la figura de su director artístico, Chase Johnsey, un artista que ha roto moldes en la danza clásica revolucionando las estrictas normas de género inherentes a esta disciplina.

De la mano del mismo Johnsey en el papel protagonista, hemos podido experimentar algunos de los estereotipos que a menudo los bailarines, así como el resto de los humanos, se ven obligados a no cuestionar por seguir encajando dentro de nuestra sociedad. Cuestiones referentes al rol de género, al miedo, a la angustia, al no encajar en una sociedad que te dice cómo debes ser, cómo debes andar, como te debes mover… Quién debes ser.

Perspectives es una lucha constante por convertirse en lo que uno es. Un baile canto al ser humano sin distinciones, naturaleza, procedencia o sexualidad. Johnsey nos agarra bien fuerte de la mano y nos invita a emprender un viaje en conjunto hacia un mundo de lucha, de sueños y de transformación, a partir de la figura icónica del cisne y la música de Chaikovski.

El Ballet de Barcelona es un conjunto de danza que sabe muy bien cómo mezclar la danza contemporánea con el ballet más clásico. Siempre, en su justa medida, añaden a sus espectáculos dos partes iguales ambas disciplinas que, de forma orgánica, se diluyen entre sí para presentarnos un espectáculo redondo.

El inicio de Perspectives nos presenta el nacimiento del artista. Desde su gestación en el vientre de la madre hasta su precioso nacimiento en el que aun es moldeable. Sus avances, sus primeros movimientos, su aprender a caminar… nos dejan boquiabiertos en la butaca para que, poco a poco, podamos ir conociendo a la persona que se nos muestra en escena. El ser humano va creciendo, va avanzando en edad, mientras el artista, el performance se va creando bajo sus experiencias personales. La esencia de Chase Johnsey irá asomando poco a poco mientras crece y trata de convertirse en primera bailarina de El Lago de los Cisnes.

El espectáculo cuenta con la hipnótica coreografía de Ariadna Monfort, Chase Johnsey, Luke Prunty & David Rodriguez y Anna Ishii y la música de Verdi, Johan Hasse, Jakub Józef, Pink Floyd y P.I Tchaikovski. Múltiples perspectivas y sonidos que hacen que el producto final que disfrutamos sea tan potente visualmente como para que los escasos 70 minutos en escena pasen en un abrir y cerrar de ojos. Queremos más y esperamos que sea bien pronto.

Crítica realizada por Norman Marsà

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