novedades
 SEARCH   
 
 

01.03.2022 Críticas  
From Bach to Radiohead

El pasado 24 de febrero, la Sinfónica de Tenerife ofreció su 10º concierto de la temporada con el título From Bach to Radiohead en el Auditorio de Tenerife (Islas Canarias). Junto a ellos, el tenor Jose Manuel Zapata como maestro de ceremonias, además de solista.

Este fue un espectáculo musical atípico puesto que propuso una amplia variedad de obras musicales que abarcaban épocas desde el siglo XVII hasta el presente y tocó estilos tan variopintos como el clásico, el flamenco o el rock. El objetivo de sus ideólogos fue atraer a todo amante de la música, puesto que, a su modo de entender, esta se puede amar desde todo su abanico de colores y timbres, sin necesidad de circunscribirse a un solo estilo. Es por eso que los arreglos musicales realizados por el guitarrista Juan Francisco Padilla, son la prueba fehaciente de que al unir a Bach con Radiohead, o tocar una canción de Iron Maiden con una orquesta sinfónica, el resultado llega a ser sorprendente y hasta espléndido.

Zapata marcó desde el inicio lo que el concierto nos iba a ofrecer. Salió desde la parte posterior del auditorio, entonando a capella el conocido O sole mio. Su indumentaria de esmoquin con zapatillas deportivas blancas y sus palabras de introducción, cargadas de un gran sentido del humor, hicieron que se metiera al público en el bolsillo, demostrando que es un gran maestro de ceremonias.

Su participación a nivel vocal fue más que correcta. Si bien en su interpretación de The Trooper de Iron Maiden no sonó exactamente como lo hacía Bruce Dickinson, al entonar el tango Garganta con arena de C. Castaña, nos emocionó con un gran control de la voz e interpretación exquisita.

Michael Thomas dirigió la sinfónica con gran entrega. Hizo gala de su versatilidad al combinar la dirección junto con el violín en algunas de las piezas, demostrando por qué se le ha llegado a definir como un músico poliédrico. Nos dio una muestra de su creatividad al incluir en el repertorio la original y sonora Harold is Islington, compuesta por él mismo. Con su excelente interpretación, quedó latente su implicación en este proyecto que fusiona tan distintos géneros.

Gran parte de responsabilidad de esta selección de fusiones musicales fue del guitarrista Juan Francisco Padilla. El maestro nos regaló su magia, no solo con la guitarra, sino también con unos arreglos que formaron delicias sinfónicas de las que disfrutamos plenamente. El punto culminante llegó en el momento de la interpretación de diez minutos de Spiegel im Spiegel de A. Pärt y No surprises de Radiohead. Padilla mezcló violines y guitarras flamencas, creando uno de los momentos más extraordinarios de la velada.

La Sinfónica de Tenerife se convirtió en una acompañante de lujo. Sus credenciales fueron notables gracias a la energía, precisión y atención a los detalles y musicalidad de las diferentes interpretaciones. Pero donde se hizo notar, suscitando uno de los momentos más sublimes, fue en su versión de Hyperballad de Björk.

Finalizado ya el concierto, el público en pie ratificó lo que los ideólogos de esta arriesgada apuesta habían defendido: que la música posee un amplio abanico de sonoridades, formas, texturas y colores y que abrirse a ello solo nos reportará disfrute y hasta cierto grado de felicidad.

Crítica realizada por Celia García

Volver


CONCURSO

  • COMENTARIOS RECIENTES