AI and Music S+T+ARTS Festival celebra su primera edición en el CCCB de Barcelona y nos deja un cierre espectacular reventando aforos en los últimos shows. El primer festival donde se junta el arte y la inteligencia artificial, donde surgen preguntas, demos, experimentos y auténticos shows. Casi lab en vivo con colaboraciones recién salidas del horno.
AI and Music S+T+ARTS Festival inauguró su llegada el pasado miércoles noche con el concierto de Marco Mezquida en el Auditori. Un concierto que llenó su aforo por completo y que muchos tuvieron que seguir en streaming. Una oportunidad única y emocionante ya que se trataba del primer concierto de piano junto a una IA ¿el resultado? Impredecible.
Marco Mezquida amenizó esta apertura del festival deslizando sus virtuosas manos por el piano de cola del Auditori. Un concierto en el que reinó la improvisación para hacer este viaje, esa conversación con la IA lo más interesante posible. Rapidez, agilidad interpretando interesantes melodías de todo tipo. Un juego entre la máquina y el pianista en el que hubo fraseos electrónicos que podían sugerirte un bailarín de claque o un percusionista al puro estilo latino deslizándose entre los arpegios de Marco. Un show con muy buena acogida que dejó muy buen sabor de boca.
El jueves tuvo lugar la programación de más peso del festival ya que se reunieron científicos, artistas, bailarines, cantantes, músicos y estudiantes para investigar. Y no solo se unieron por este día tan intenso sino que algunos de ellos llevaban meses de preparación y otros se juntaron en los últimos días para concretar detalles o iniciar proyectos. AI and Music S+T+ARTS Festival juntó a auténticos genios para mostrarnos que la ciencia y el arte van de la mano.
Desde bien temprano tuvimos el primer experimento sonoro invadiendo el CCCB. Lina Bautista y Júlia Múgica nos deleitaron con wAlggledance; un show de pura música electrónica muy rítmico que hacía que unos mini robots circulares emitieran movimiento. Un experimento en vivo, una demo, tan real que los pequeños artistas robóticos tuvieron que reiniciarse.
Hubo también shows exclusivos en vídeo que solo estaban disponibles online también desde primera hora, como el show de piano de los LP Duo presentando Beyond Quantum; un show a dos pianos y doble teclado MIDI en el que reinaron las melodías arregladas combinadas con piezas más profundas con sonidos y arpegios electrónicos y ambientales.
Durante las conferencias tuvimos la oportunidad de aprender mucho más sobre el mundo de la IA y es que una de las frases que llegaron a marcar la velada fue de la mano de los representantes de NTT Data afirmando que crear código es un arte, es una creación compleja y que están orgullosos de por fin tener un espacio que así los considere y les de su espacio. Y vimos cosas asombrosas, vimos el código en vivo, vimos cómo se programa la Inteligencia Artificial, su curva de aprendizaje y las conminaciones que crea por el camino.
Si nos centramos en los shows lo cierto es que hubo mucha variedad pero totalmente en la línea del festival . Reiko Yamada y Maciej Lewenstein nos trajeron una representación muy loca que iban presentando distintos músicos; una caja de música en tamaño grande, voz y flauta interpretando golpes sonoros y notas locas, ambiente electrónico y trompeta demoníaca y finalmente una batería creadora de ritmos infinitos que finalmente se juntaron para formar una banda de lo más espeluznante.
Hongshuo Fan tenía un Hall Stage listo para triunfar, sin embargo, las recientes normativas del Brexit combinadas con las del COVID, se lo pusieron difícil para venir y finalmente se ausentó con un tremendo pesar. Pero no sin dejarnos un vídeo de su show a la espera y con la ilusión de presentarlo en directo. Hongshuo dominaba a su bestia digital con unos sensores en sus manos mientras la imagen se desplazaba a su antojo siguiendo la música: desde un guiño al juego del rompe ladrillos, hasta esferas que se quiebran y desintegran.
AWWZ se marcó el esperado back to back con AI DJ. Un dj set de ritmos urbanos con base electrónica que nos dejó sin habla. La AI se basó en los comentarios que se dejaron al solicitar temas que la gente quería escuchar en el festival y que AI DJ tuvo que combinar y mezclar a la perfección con los temas elegidos por AWWZ. Y lo cierto es que no nos dimos ni cuenta. AWWZ, vestida para matar, nos hizo vibrar con su carisma en el escenario bailoteando sin parar, tanto que el público, aunque tímido al principio, rápido se contagió.
La tarde fue atrayendo más y más y gente y se juntaron unos cuantos para formar una buena fila para ver a la gran Holly Herndon presentando Holly+ junto a Maria Arnal y Tarta Relena. 48h de experimentación y aprendizaje sobre IA que vivieron las tres intensamente para mostrarnos Holly+. ¿Y de qué estamos hablando con este proyecto? Holly Herndon mostró su proyecto a las chicas y ellas, cantando, transformaron su voz en acompañamientos de flauta, violín, armónicos hasta, finalmente, traer la voz de Holly a su propia canción. Y es que cogían el micro y sonaba, a tiempo real y sin retardo, la voz de Holly cantando en el tono que entonaban la canción y en el idioma que interpretaban. En otros momentos la voz de Holly aparecía haciendo los armónicos de las cantantes y, al final, para amenizar, hacernos reír y ver que todo es real, un compañero estuvo cantando y la voz de Holly sonaba en su lugar. para despedirse el mismo se despidió en nombre de la artista robándole la voz con el micro. Miles de preguntas surgen sobre Holly+ sin embargo es un proyecto, sin duda, ambicioso y con mucho camino por delante.
La hora de la danza reunió también una buena cola en la entrada del Teatro Stage para recibir a Hamill Industries & Kiani del Valle. Presentaron un show de movimiento en el que la inteligencia artificial tiene que interpretar la coreografía de la bailarina Kiani del Valle la cual nos sorprendió con su outfit y con sus movimientos; con un mono con transparencias negras, unas trenzas larguísimas y un maquillaje brillante, Kiani deslumbró el escenario desde que se subió a este. Su movimientos un sueño hecho realidad. Música electrónica dura, rítmica, sincopada, rota, industrial… unos ritmos que ella interpretaba frenéticamente con movimientos marcados. Despegar la mirada de la bailarina era casi imposible pero totalmente necesario para entender de qué trataba el show, y es que flores, insectos, animales, agua, hasta el holograma de una persona, imitaban sus movimientos… flores que se abren, agua que se expande… espectacular.
Finalmente nos despedimos con el show de Mouse On Mars que dejó a más de uno fuera por bastante rato ya que, por seguridad, el control de aforo era esencial. Un escenario lleno de instrumentos y una batería gigante te hacían vibrar toda la sala movimiento tras movimiento poniendo a prueba el increíble sonido de la sala.
Sónar nos ha traído este espectacular festival donde pone en el mapa el arte del código, del algoritmo, de la Inteligencia Artificial a la cabeza. Sin duda un festival a seguir muy de cerca ya que la tecnología evoluciona y quién sabe lo que nos traerá el año que viene.
Crónica realizada por Nina Delgado
