La mezzosoprano norteamericana Joyce DiDonato ha debutado hoy en el Palau de la Música Catalana de Barcelona con el programa In my solitude. Acompañada por el pianista y arreglista Craig Terry, la cantante nos ha llevado de la mano para recorrer épocas y estilos diferentes con intención de curarnos de un 2020 muy duro.
Agradecida en su estreno en el Palau de la Música de Barcelona, Joyce DiDonato aparece sobre las tablas del templo barcelonés bajo grandes aplausos.
El concierto se inicia recordando Arianna, abandonada por Teseo en la isla de Naxos después de ayudarle a vencer el temido minotauro, en la versión que compuso Haydn, una cantata para voz sola y instrumento de teclado. Una serie de recitativos y arias muestran la protagonista sucesivamente sorpresa, herida, atemorizada y devastada al ver marchar a su amado. Joyce DiDonato se muestra presente, perspicaz y desenfrenada en la sentida aria Arianna a Naxos, Hob. XXVIb:2 de Franz Joseph Haydn. El público agradece bajo cálidos aplausos la fantástica obertura y ella demuestra gratitud por la asistencia del público. Como ella misma indica: «el poder conectar en vivo con todos en un momento complicado es algo maravilloso». Desea que todo cambie de nuevo para volver a disfrutar como antes. Tiene fe en que con el tiempo podremos ser más.
Durante estos meses de confinamiento, DiDonato (re)descubrió a Gustav Mahler; un compositor que habla de naturaleza, vida y amor. A continuación, con un sorprendente salto temporal, nos situamos en los Rückertlieder de Gustav Mahler. Lo forman cinco canciones, de las que DiDonato canta tres (“Ich atmet’ einen linden Duft”, “Liebst du um Schônheit” y “Ich bin der welt abhanden gekommen”) que nos transportan al aroma del tilo, el deseo de amor eterno y, también, la premonición de la muerte. Mahler le ha ayudado durante la pandemia y desea que nos ayude a nosotros bajo su mensaje de esperanza. Tras la perfecta interpretación de la primera, la sala se hunde en un silencio que no se rompe hasta finalizar las tres piezas de la selección.
Tras un breve receso, DiDonato cambia el tono del concierto y canta el aria de Cleopatra “Morte col fiero aspetto”, de la ópera Antonio e Cleopatra de Johann Adolph Hasse donde demuestra su agilidad vocal bajo una potente y desafiante aria. Su presencia escénica increpa al público quien disfruta cada nota.
Tras ella, cambia el tercio de concierto llevándolo hacia la parte más dramática de las óperas con el aria de Cleopatra “É pur così in un giorno / Piangerò la sorte mia”, de la ópera Giulio Cesare de Georg Friedrich Händel. En ella, DiDonato nos sigue deslumbrando con su alta agilidad vocal y el control de las notas en los pianissimos que deshacen al público en elogios y en incesantes aplausos.
Tras una pequeña historia con el público en el que bromea sobre las canciones que todas las cantantes primerizas quieren cantar, ya que quieren asemejarse a Maria Callas o Montserrat Caballé, canta “Caro mio ben” de Giuseppe Giordani, una deliciosa canción con arreglos de Craig Terry que le recuerda a sus primeros pasos.
Tras ello, dejamos la ópera para pasar a una parte más cabaretera y divertida. Inicia esta parte con “Se tu m’ami / Star vicino” de Alessandro Parisotti y Salvator Rosa con arreglos de Craig Terry. En ella, DiDonato disfruta y se deja llevar entre las escalas jugando con su voz y mostrándonos su impresionante rango vocal. Llevándonos desde su parte más grave a sus ligeros agudos pasando por un marcado rasgado roquero que embelesa a un público que no está acostumbrado a disfrutarla en esa tesitura. Tras grandes y merecidos aplausos en una pieza arriesgada pero exquisita, DiDonato nos eleva en un sueño platónico con “(In my) Solitude” de Duke Ellington con arreglos de Craig Terry.
Para acabar el repertorio, todo un clásico del cabaret popularizado por la fantástica cantante francesa Edith Piaf: “La vie en rose” de Louis Guglielmi y Marguerite Monnot con arreglos de Craig Terry. Su voz operística de mezzosoprano da un toque de distinta calidez a la melodía. Con sus controlados pianos y su masticada dicción, finaliza un repertorio increíble.
Tras los aplausos, llegan los bises. Sorprendiendo a todo el público, DiDonato se sienta al piano y, a cuatro manos con su director musical, interpretan una pieza musical. DiDonato agradece la asistencia al público y le pide precaución en estos tiempos difíciles: “con cuidado, con salud, con corazón. Aguantemos un poco más y, después, llegará la vida”. Finaliza el concierto con una versión de “Somewhere over the rainbow”, tema principal de la película de la Metro Goldwyn-Mayer The Wizard of Oz, popularizada por Judy Garland en la que, de nuevo, hacer caer al público rendido a sus pies.
Tras la petición de un último bis con el público en pie, DiDonato se lanza bajo un improvisado “I love a piano” tema del musical White Christmas de Irving Berlin (1915) en el que no duda en jugar con su pianista. Canción que hace enloquecer al público y le hace saltar de la butaca a aplaudir.
El estreno de Joyce DiDonato en el Palau de la Música de Barcelona no podría haber sido mejor. Desde las inmejorables arias de ópera, pasando por los breves Lied de Mahler y finalizando por las versiones en voz operística de canciones de cabaret, Joyce DiDonato ha encandilado a un público que no dejaba de comentar que era mejor disfrutarla en directo que en las grabaciones. Joyce ha arrasado con todos cual huracán. Su perfección vocal y su radiante simpatía derritieron a un público entregado que no dudó en salir de casa en una tarde fría y lluviosa para no perdérsela. ¡Brava Joyce, Brava!
Crítica realizada por Norman Marsà
