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20.02.2019 Críticas  
Un clásico tras otro

El pasado 18 de febrero llegó a España, por primera vez, The Magic of Motown. Un espectáculo para disfrutar en el Teatro Nuevo Apolo de Madrid, de más de 40 clásicos con un gran elenco de cantantes y músicos a los que no hay que perder la pista.

La afluencia de gente ante las puertas del céntrico Teatro Nuevo Apolo un buen rato antes de las ocho y media de la tarde del pasado lunes aseguraba que el espíritu de la Motown se había apoderado de Madrid. Llenazo casi absoluto y la sensación de estar a punto de vivir una gran experiencia musical gracias a los éxitos de Marvin Gaye, Diana Ross, Stevie Wonder, The Supremes, The Temptations o Jackson Five entre otros.

Una batería, un teclado, un bajo y una guitarra junto a siete cantantes –cuatro hombres y tres mujeres- y focos como para alumbrar al mundo entero se amontonan sobre el escenario para dar comienzo al espectáculo con la canción Ain’t no mountain high enough. ¡Qué empiece la fiesta!

El público no dudó ni un segundo en cantar cuando llegó el estribillo del primer tema y no dejó de hacerlo en ningún momento, los propios artistas animaban a ello durante las más de dos horas de concierto –descanso incluido-, lo que demostró que los espectadores estaban presentes en todo momento gracias a los numerosos detalles que los artistas tuvieron.
Una entrada triunfal, con mucha fuerza, para ganarse al público desde la primera nota hasta la última. ¡Así, sí!

Salieron a por todas y mostraron su cuidado repertorio que alternaban con bromas en spanglish para que nadie de los allí presentes perdiera el hilo de lo que sucedía sobre las tablas. Y es que después del descanso se avecinaba un bonita sorpresa: subieron al escenario a una mujer y a una niña para que bailaran con ellos. ¡Da gusto ver la cercanía que derrochan estos artistas!

Durante el concierto pudimos escuchar temas como Signed Sealed Delivered, Grapevine, Get Ready, Dancing In The Streets, My Girl, etc. que nos hacían vibrar a todos los allí presentes demostrándonos que están en muy buena forma.
Sin disminuir el ritmo, en el tramo final hubo tiempo para que se nos fueran aún más los pies con Blame It On The Boogie. ¡Qué repertorio tan especial!

Los cambios de vestuario eran algo muy esperado en The Magif Of Motown y no defraudaron en absoluto. Siempre acordes con la música y la época. Desde vestidos ajustados de lentejuelas –para ellas- a trajes llenos de brillantina –para ellos-, todos con colores llamativos que alegraban aún más la noche. ¡Y qué maravilla cuando representaron a las Jackson Five con pelucas incluidas! Estos cambios de ropa se hacían gracias a que unos y otros se van alternando sobre las tablas.

Por último, me gustaría destacar de este espectáculo el buen montaje, el escenario lleno de focos y una original puesta en escena que nos permitía disfrutar plenamente las grandes voces de los cantantes y de sus divertidas coreografías.

Para el cierre del espectáculo reservaron Do you love me, un tema muy esperado por el público que se levantó de sus butacas para bailar, cantar y demostrar ganas de más. ¡Otra! ¡Otra! ¡Otra!

Crítica realizada por Patricia Moreno

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