Este pasado domingo, acudimos al Auditori de Barcelona para poder disfrutar de nuestra cita anual con la FSO (Film Symphony Orchestra). Este año, la orquesta sinfónica especializada en bandas sonoras de películas nos trae un programa doble (repartido en dos fechas distintas), sobre el trabajo magistral de John Williams.
Impartida por Constantino Martínez Orts, este maravilloso concierto disfrutable 100%, a la par que pedagógico, nos introduce en la variedad de sinfonías de J. Williams. Nombrado en multitud de ocasiones como el mayor compositor de todos los tiempos; la FSO nos regala una sesión de 4 horas de duración (2 horas por cada una de las fechas) en las que podremos disfrutar de lo mejor y más destacado del compositor. Sus inicios, sus composiciones premiadas, las más recordadas, sus últimas composiciones, sus fanfarrias e, incluso, su composición para la música de informativos de la CBS NEWS.
Empezando por la evocativa «Summon the Heroes» utilizada en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Atlanta, la FSO inicia el recorrido por las composiciones de Williams que nos trasladará a multitud de paisajes y épocas como la época nazi en las composiciones de «La Ladrona de libros» o «La Lista de Schindler«, a la acción más endiablada con «Star Wars» o «Superman«, al mundo mágico de «Harry Potter y la piedra filosofal» o «Hook, el capitán garfio» o al suspense con su tema más conocido: «Tiburón«.
El recorrido que la FSO nos presenta (y que recuerdo: es solo la primera parte del ciclo) es absolutamente delicioso. Pero más agradecido lo hace Constantino; su director. Se nota que es profesor y que la cultura musical es lo suyo. Su forma de explicar pieza a pieza, lo que le evoca, lo que nos evocará a nosotros al recordar las pequeñas inflexiones que nos explica antes que suene la composición… en definitiva, la pasión que le pone; es la gran parte del éxito de la FSO. Obviamente la maestría del compositor presentado es gran parte del espectáculo; tal como la perfección en la ejecución de los músicos. Pero es que la FSO no sería lo mismo sin su director. Junto al buen hacer de los músicos, la magia que impregna Constantino Martínez Orts en el ambiente es lo que hace que año tras año no dudemos en volver.
Este año, hemos de destacar la puesta en escena de la FSO. Han mejorado, se han profesionalizado en el mundo del espectáculo y ahora sus conciertos están apoyados de un juego de luces espectacular y, diferente, para cada una de las composiciones. Algo que hace que la boca se abra aún más en el inicio del show. Por otro lado, los trajes se unifican con distintas partes que todos los integrantes comparten. Pero, eso sí, hay cosas que nunca cambiarán. No podrán irse nunca de la sala sin tocar la «Marcha Imperial» o los «títulos principales» de La guerra de las galaxias IV o que se vuelvan locos en el escenario con su último bis. Su último juego sobre las tablas con el que todos nos sorprendemos en los giros musicales e instrumentales; esta vez con la marchosa composición de «La cantina» de La Guerra de las galaxias. Una delicia verlos disfrutar.
Esta vez, como casi siempre, la FSO realizó un nuevo Sold Out. No había asiento libre en el Auditori de Barcelona y es de aplaudir que una orquesta pueda colgar este cartel con suma facilidad. Por ello, como anunciaron en el concierto, volverán este mes de Diciembre de nuevo con la primera parte de este tributo a John Williams. Y, como estaba planeado, podremos disfrutar de la segunda parte del ciclo el 3 de Febrero de 2019 con piezas procedentes de «El violinista en el tejado«, «JFK«, «War Horse«, «Memorias de una Geisha«, «Encuentros en la tercera fase«, «Las cenizas de Angela» o «E.T.«. Yo no pienso perdérmelo. ¿Y tú?
Crítica realizada por Norman Marsà
