El trío cómico Tricicle llega al Teatro de La Luz Philips Gran Vía con Hits, una recopilación de doce sketches que han interpretado durante sus 37 años de carrera teatral.
Siempre es buena noticia poder volver a ver a Joan Gràcia, Paco Mir y Carles Sans sobre un escenario, aunque se trate de un espectáculo conmemorativo con el que esta compañía de teatro gestual inicia su retirada. Una retirada en la que piden la participación del público, ya que disponen de una página web donde el público puede votar hasta cinco de los cuarenta sketches posibles, de tal modo que los doces más aclamados en cada población son los que constituyen la parte central de esta magnífica propuesta.
Ha llovido mucho desde aquel uno de noviembre de 1979 en el que estos tres actores fundaron una compañía teatral basada en el lenguaje gestual; y a día de hoy me sorprende como, a pesar de haber pasado casi cuarenta años, son capaces de seguir con tanta energía, conservando la frescura, manteniendo la complicidad con el público y mostrándonos con admirable fuerza su cosecha de éxitos.
Tricicle es un humor en plena forma que no pasa de moda y que se encargan de actualizar modificando pequeños detalles –aspectos tecnológicos como cambiar tocadiscos por teléfono móvil, por ejemplo- pero es que realmente no hacen falta muchos elementos ni grandes decorados para conseguir que la imaginación del público tome las riendas en todo momento. Un espectáculo muy medido, cuidado hasta el último detalle, con números magistralmente unificados, con pequeños detalles de interacción con el público –ellos mismos comienzan desde el patio de butacas- y con hábiles recursos de iluminación y sonido que resultan perfectos para la sumersión de los espectadores en esta placentera experiencia de inicio a fin. Y hablando de finales: cierran el espectáculo con rapidísimos gags que dejan casi sin respiración entre carcajada y carcajada, ¡tronchante final!, y es que toda compañía mítica debe despedirse así, con una traca final y por todo lo alto, momento en que el público se pone en pie aplaudiendo efusivamente. No es para menos.
Independientemente de que pertenezca a su veterano público o Tricicle sea toda una novedad para usted, no deje de ver el que podría ser el último espectáculo de esta imprescindible compañía de teatro a la que yo le pediría que no se retiren nunca.
Crítica realizada por Patricia Moreno
