El Teatre del Raval continúa en su línea de promocionar clásicos del cine y del teatro americano y que tan bien se le da. En esta ocasión, Josep Minguell ha tomado prestado el libreto de Neil Simon ‘The Sunshine Boys’ (autor también de clásicos como ‘Sweet Charity’ o ‘La Extraña Pareja’) para versionarlo como Al i Oli.
Esta es la historia de un dúo de cómicos que triunfaron durante décadas, pero que lleva ya años retirado, habiendo acabado su historia en la completa desaparición y ruptura amistosa de ambos. Esta situación tiene que cambiar, ni que sea temporalmente, cuando se les pide un reencuentro para la televisión donde se van a recordar viejas glorias del mundo de la comedia.
Al i Oli es un vodevil entretenido, que te hace pasar un buen rato. Minguell, quien está al cargo de la dirección, también se ha asignado el papel de Al Lewis y comparte escena con Mingo Ràfols en el papel de Oli Clark. Los dos actores, de raigambre catalana, se llevan las partes más divertidas de la obra, que parecen escritas para ellos pues resuelven su comicidad y los chistes dentro de la obra como si llevaran toda la vida juntos.
Completan el reparto un Oriol Casals que, tras haber interpretado recientemente a Sartre, ahora nos muestra su cara más entretenida en el papel de Ben Clark, el sobrino de Oli, Àngela Jové como enfermera y Thais Buford como regidora.
Algo que siempre destaca en el Teatre del Raval es el cuidado que le ponen al vestuario y la escenografía que, sin escatimar detalle, es siempre fiel a la época. En esta ocasión, para no variar, vuelve a a ser así. Enhorabuena a Ramón de los Heros por el espacio escénico y a Jordi Bulbena y Mariela Sernagoras por la vestimenta.
Una hora y cuarenta minutos para pasar un buen rato y soltar alguna que otra carcajada. Una agradable escapada, para desconectar de la cotidianidad.
Crítica realizada por Diana Limones
