Con el final del invierno, llega Sonar para presentarnos estas pequeñas pinceladas de lo que será Sonar de Día, donde la experimentación y los proyectos más ambiciosos toman lugar para abrir las mentes y las puertas a la tecnología y el arte.
Parece ayer cuando tuvimos el último show en el espacio de Mazda, no obstante, la expectativa sigue apuntando hacia Sónar para ver qué nos tienen preparado para esta nueva edición del festival.
En este primer Taste de Sonar +D contamos de nuevo con la presencia de la canadiense Myriam Bleau. El año pasado tuvimos el placer de presenciar su show “Soft Revolvers” en el que luz, peonzas y samples eran los protagonistas de una improvisación perfecta. A pesar de que Sónar no suele repetir artistas de un año a otro, han visto de nuevo el talento en esta artista y se han interesado por su nuevo y ambicioso proyecto “Autopsy.glass”.
Con la finalidad de poner al espectador en tensión, Myriam Bleau manipula las copas hasta la rotura, unas veces con delicadeza y otras con violencia, la artista obtiene un rango de sonidos que pueden ser ligeros y resonantes o cortantes y abruptos. Belau desarrolla una composición sonora que combina sonido y luz mediante las diferentes resonancias del vidrio. El objetivo es catalizar la tensión que se da ante la inminente destrucción del delicado material.
Se trata de un espectáculo donde la armonía entre sonido, imagen y representación está perfectamente afinada. La sincronía entre las copas, la luz y los sonidos puso un poco en duda la composición e improvisación de la actuación, pues, con solo tocar una copa, podíamos ver las demás armonizarse e iluminarse de inmediato. Los gestos de la artista para cambiar los sonidos eran mínimos confundiendo así el funcionamiento total de la intrigante instalación.
A través de la manipulación de las copas con tijeras y varios instrumentos llegó a complementar el show modificando los sonidos y amplificándolos creando lo deseado; un clima de tensión e intriga con lo que sucederá después, no obstante, dejó a más de uno con la sensación de que se trataba más de una representación teatral que un show musical a pesar de todo el trabajo musical y preparación que precisa el show.
A tres meses del festival, mantendremos los ojos bien abiertos ante las noticias que Sónar nos vaya dando, tanto de incorporaciones al cartel definitivo así como los próximos Taste Of Sónar y su espectacular programación.
Crónica realizada por Nina Delgado
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